La llegada de la Pandemia por el COVID-19 que derivó en la emergencia sanitaria global vino a desestabilizar la vida diaria en todos los ramos posibles. El deporte motor ha sufrido muchos retrasos y posteriores cancelaciones de diversos eventos en sus campeonatos debido a las restricciones que se deben tomar para evitar la propagación alarmante de la enfermedad. En la Indycar series esto los llevo a visualizar una temporada compacta que permita llevar acabo protocolos que den carreras con el mínimo de riesgo para los implicados, incluidos los trabajadores en las sedes de los compromisos. También se adoptó  la idea de fechas dobles que reducen la logística y compactan actividades para así poder extender el número de competiciones sin levar los costos.

Se visualiza un año donde la fiabilidad y efectividad en los equipos sea un factor determinante para lograr conquistar el inusual campeonato. Las organizaciones robustas con recursos suelen prevalecer en estas situaciones y aunque todo apuntaba a un dominio del Team Penske, la realidad se lo está otorgando hasta el momento a Chip Ganassi Racing.

Hasta el día viernes Scott Dixon se marcaba como el referente por sus victorias en las carreras del óvalo de Texas y el circuito de Indianápolis. El neozelandés, campeón de la serie en cinco ocasiones, parecía brillar por sus actuaciones donde mostró no solo el ritmo en carrera para aplastar a sus contrincantes sino también la experiencia para sacar ventaja cuando la suerte lo volteaba a ver.

El sábado con la tercera victoria consecutiva en el comienzo de la temporada debido a el funcionamiento global en estas carreras por parte de su equipo, nos hizo voltear a ver al resto de los autos de la escuadra.

La victoria de Rosenqvist hoy en la segunda carrera en Road America, confirma esta idea, que es ahora cristalina para cualquier seguidor de la Indycar que pretenda hacer un análisis con un sentido de profundidad.

Ganassi and Honda's dominance continued this weekend, kicking off Saturday with Scott Dixon winning at Road America.

Ganassi and Honda's dominance continued this weekend, kicking off Saturday with Scott Dixon winning at Road America.

Race Review presented by @HondaRacing_HPD. pic.twitter.com/IzCgimU2of

— IndyCar on NBC (@IndyCaronNBC) July 12, 2020

El año pasado el equipo anunció el cierre de su ciclo con Ford en el campeonato de resistencia IMSA, con un plan para evitar el despido del personal involucrado en ese auto moviéndolos a una tercera entrada en la IndyCar para esta temporada. Marcus Ericsson trajo el capital requerido para hacer funcionar dicho grupo. Ampliando nuevamente la operación de Ganassi a más de dos autos.

Dixon estrenó nuevo ingeniero dentro de sus filas este año con la llegada de Michael Cannon, quien llegaba procedente del auto de Ferrucci con Dale Coyne. Añadiendo más variables a este 2020.

El resultado ha sido más que evidente, Chip Ganassi Racing no solo tuvo dos autos competitivos en Texas en la carrera inicial, sino que rápidamente ha mejorado en su tercer entrada. Ericsson ha terminado dentro de los diez primeros clasificados en las últimas tres carreras, sexto en el GMR GP, octavo el sábado y cuarto hoy domingo. Marcus dió muestras de un brío renovado con movimientos en pista muy pulidos incluidos los vistos en Wisconsin contra Scott Dixon.

Felix Rosenqvist ya el año pasado había expuesto su potencial, los problemas en Indianápolis y en la primera carrera del fin de semana no están ligados a las capacidades del grupo en el auto del sueco. En su primera victoria en la categoría, se vió en dominio de la estrategia, con un ritmo que dejaba entrever que en la parte final de la carrera daría el ataque frontal para ganar.

Una de las noticias más sonadas fue la presencia de otro ingeniero de carrera al que habitualmente lo asistía. Felix dijo que el cambio no fue determinante ya que todo el equipo ha trabajado fuertemente para soportar algún movimiento de personal inesperado.

No es coincidencia que Mike Hull comentara en una entrevista con Marshall Pruett que el dueño, Chip Ganassi, no creía en títulos dentro de los puestos de trabajo en su organización, la gente entra a una cultura donde lo importante es que puede hacer por el desarrollo y el funcionamiento del equipo. Cannon en el auto número 9, llega para aplicar su experiencia y conocimiento para mejorar al equipo no como una figura de cambio per se. 

Ver factores como la estrategia con el auto PNC Bank en el Indy GP, la ausencia de errores en las paradas el sábado en el REV Group GP o el ritmo de carrera del domingo, se convirtieron en acciones que cambiaron el rumbo observado hasta ese momento para terminar logrando las victorias de Dixon y Rosenqvist.

Otro elemento importante en la fortaleza de los autos antes mencionados con el motor Honda, que se ha visto potente y fiable en las dos configuraciones de trazados. Los resultados parecerían entrever una relación mucho más solida que en Andretti Autosport.

Jubilation for @FRosenqvist after his first @IndyCar series victory! 🙌🏼 #NTTDATARacing | #REVGROUPGP pic.twitter.com/2uFuAvBDkU

— CGR IndyCar (@CGRindycar) July 12, 2020

La eficiencia en la operación de Chip Ganassi Racing, sumado a la gran calidad de sus pilotos los hace ser el único equipo que ha ganado hasta este momento, con Scott Dixon de líder del campeonato, Marcus Ericsson en sexto y Felix Rosenqvist octavo. Aún quedan bastantes fechas en la temporada y la tendencia puede cambiar de un fin de semana a otro.