El Gran Premio de México está en Terapia Intensiva

El Gran Premio comenzó a temblar desde que el actual presidente triunfó en las elecciones del 2018, el discurso del actual presidente no es otro más que el de posicionarse en contra de cualquier evento que pueda disfrutar e identificarse con la clase alta de la sociedad mexicana, no le ha importado la derrama económica documentada (entre el 300 y el 600% superior a la inversión) en la Ciudad de México, los hoteles, restaurantes, servicios de transporte público, ventas de artesanías, bares y todo tipo de ventas en los centros comerciales recibieron felices siempre a los miles de visitantes que acuden cada año a nuestra más grande fiesta deportiva anual, el Gran Premio de México de F1. La derrama económica beneficia año con año a miles de empleados, a la clase trabajadora y dueños de negocios, a la gente que día con día sale a trabajar en la Ciudad de México, pero eso parece no importar ni ser tomado en cuenta por el actual gobierno de México.

La Fórmula 1 normalmente exige el aval del gobierno estatal y federal de cada país como uno de los requisitos para la renovación de un contrato como éste (a excepción de un par de carreras tal vez), además el autódromo Hermanos Rodríguez no es propiedad privada, es propiedad del gobierno de la Ciudad de México, cualquier modificación o remodelación profunda y la inversión que esto conlleva es para pensarse más de una vez, porque eso sí es un barril sin fondo y jamás volverás a ver ese dinero de vuelta.

Pero.. si el Gran Premio es un enorme negocio y un enorme éxito para todos…¿porque está a punto de entrar en coma?

Porque el Presidente de México tiene otras ideas, él prefiere que el dinero que se invertía en el Gran Premio de México por parte del gobierno sea destinado a construir un Tren, si, un Tren por la Ruta Maya, no le importa en lo más mínimo construir un Tren sobre miles de kilómetros de selva, sobre el hábitat natural de varias especies en peligro de extinción, lo único que le importa es hacer realidad su capricho, y así, por un capricho los fanáticos del automovilismo en México están a punto de perder la joya de la corona, la carrera que durante 23 años esperamos que regresara a México y que ha sido considerada la mejor carrera de todo el mundial de Fórmula 1 por 4 años consecutivos.

¿Cuál sería la última posibilidad para que el Gran Premio de México lograse una renovación multianual de su contrato?

La única oportunidad en este momento es que la iniciativa privada se una, formen un frente común y decidan invertir lo necesario para que el Gran Premio de México siguiese en el calendario del mundial de F1. 

La realidad es que se está intentando que así sea, hay empresarios muy fuertes buscando encontrar la salida positiva a esta muy triste situación. ¿Alcanzará el tiempo?…no lo sabemos, lo que es cierto es que todas las partes quieren que la carrera siga adelante, el Gran Premio de México se ha convertido en un activo importante del calendario de F1 para Liberty Media y ellos junto a la organización del Gran Premio de México lucharán hasta lo último para salvarla de una muerte anunciada, el tiempo se agota…