La escudería Renault está de enhorabuena. La formación dirigida por Cyril Abiteboul se ha consolidado en el campeonato como la primera fuerza de la zona media de la parrilla. Ni siquiera Force India, sumando los puntos desde el comienzo de 2018, habría conseguido superar los obtenidos por la marca del rombo. Nico Hulkenberg y Carlos Sainz han correspondido a las bondades del monoplaza. Ambos pilotos han firmado un año sólido en el que, en conjunto, han duplicado los puntos que el equipo galo obtuvo la temporada pasada.

Nico Hulkenberg le ha ganado el duelo particular a su compañero Carlos Sainz. El piloto germano, aprovechando un arranque de temporada excepcional, ha acumulado 69 puntos en su casillero por los 53 del español. Sin duda, estamos hablando de uno de los pilotos más experimentados y respetados de la parrilla, que por unas razones u otras, nunca ha contado con un monoplaza para luchar por cosas más grandes. El piloto de Emmerich ha disputado en la Fórmula 1 156 grandes premios, y por desgracia para él, aún no ha probado el sabor del champagne en el podio. Hulkenberg es el líder absoluto de esta mala estadística, y a no ser que Renault, especialmente en su propulsor, de un salto de calidad de cara a 2019, parece que la cifra continuará aumentando. Tres son las veces que el alemán se quedó a las puertas, pero ninguna de ellas fue con su actual equipo.

Carlos Sainz sigue demostrando su potencial año a año. A pesar de haber terminado la temporada a 16 puntos de su compañero, el madrileño ha batido en el duelo directo al germano 11-10. El curso de Carlos ha estado marcado por grandes actuaciones, pero también por mala fortuna con las averías, al igual que el de Nico. La fiabilidad del motor Renault no es todo lo buena que debería ser, como pudimos observar también en Red Bull. En definitiva, el piloto español se ha asentado por completo en la Fórmula 1 esta temporada. En 2019 cambiará de aires. El ex de Toro Rosso pilotará para McLaren con el objetivo de devolver al lugar que le corresponde a los de Woking. Además, y con su desvinculación total de Red Bull, es la primera vez que contará con un contrato de más de un año, hecho que le aportará estabilidad dentro del paddock.

Si algo debo mejorar Renault es sin duda su unidad de potencia. Si bien es cierto que Red Bull ha conseguido luchar por las victorias montando uno, las carencias del mismo no pueden esconderse. Está a años luz aún de los propulsores Mercedes y Ferrari, y además, no es fiable. De hecho, la escudería Renault ha sido la novena que menos vueltas ha completado en carrera, sólo por delante de Toro Rosso, y su motor Honda.

A pesar de esto último, Renault parece que carbura. Los hombres del rombo se encuentran claramente en una progresión ascendente respecto a años anteriores. Si bien su última victoria se remonta a 2008, (sin contar la era Lotus), y su último podio fue a manos de Heidfeld en 2011, la escudería francesa parece estar destinada a ocupar los puestos del podio en un futuro cercano. Además, en 2019 contarán con una de las mejores parejas de pilotos de toda la parrilla con la llegada del carismático Daniel Ricciardo. Si consiguen mejorar su propulsor, y cuentan con un chasis similar o ligeramente mejorado, la distancia con el top 3 debería verse reducida y las opciones de volver a ver a un piloto de Renault en el podio se incrementarán de forma exponencial.