Max Verstappen consiguió la victoria en el GP de México por delante de los Ferrari de Sebastian Vettel y de Kimi Räikkönen. El holandés se impuso en la salida a su compañero ‘poleman’ Daniel Ricciardo y no soltó la primera plaza hasta la bandera a cuadros. Con sustos de neumáticos y de fiabilidad incluidos.

“Ha sido increíble, la salida ha sido la clave. Si te soy sincero no pude dormir bien anoche y tenía la determinación de que iba a ganar hoy. Ha sido un gran trabajo por parte del equipo teniendo los neumáticos adecuados disponibles y el coche ha funcionado bien”.

Tras dos tercios de carrera algo tranquilos para el piloto holandés se le añadiría una buena ración de pimienta a su victoria tras el abandono de su compañero Daniel Ricciardo por problemas de motor. El miedo a que esos problemas se reprodujesen en el otro Red Bull eran evidentes y fue muy insistente Verstappen para que se comprobase todo y evitar riesgos pero finalmente no pasó nada y el holandés pudo cruzar la línea de meta: “Ha sido una verdadera pena perder a Daniel, pero en ese momento lo único que puedes hacer es asegurarte de que el segundo coche no se retira. Finalmente no ocurrió nada y todo salió a la perfección” – aseguró el piloto holandés luego de certificar su quinta victoria conquista en Fórmula 1 y la segunda en el circuito Hermanos Rodríguez de forma consecutiva.