A los 42 años, Cyril Abiteboul es el director de equipo más joven de la parrilla. Su gran experiencia comercial más que de ingeniería han reflejado el pequeño y lento progreso de Renault desde su vuelta al Gran Circo en la era híbrida en 2016. A pesar del gran progreso mostrado por la marca francesa, siguen muy lejos del top 3, tanto en potencia de motor como en el apartado aerodinámico.

Red Bull dijo adiós a los motores Renault en 2018, por lo que 2019 montaron motores Honda, más potentes que los galos. No obstante, la gran humillación vino en ese mismo año, pues McLaren, equipo cliente de Renault, les superó ampliamente en el Mundial de Constructores, lo que supuso una gran humillación para los galos.

El equipo del rombo escalo progresivamente en el campeonato desde su regreso, quedando como mejores del resto en 2018. Sin embargo, no es suficiente para la escudería bicampeona del mundo.

El francés ya estuvo en la marca gala en 2001, llevándose un sabor algo amargo de la gestión de un equipo de F1, pues también estuvo perseguido por el equipo Caterham, que desapareció a final de la temporada 2014.

“Solo hay una palabra: decepcionante”, comenta Abiteboul sobre 2019 para la revista Autocar. “Llegó después de tres temporadas de progresión. Con Daniel uniéndose al equipo, nos hubiera gustado que eso continuara, y se estancó”.

Se supone que es cuestión de tiempo de que Renault venda el equipo como hizo a finales de 2010 [lo adquirió posteriormente Lotus]. Además, los cambios en la cúpula, con Luca de Meo reemplazando al deshonrado [pero amigable con el paddock], Carlos Ghosn, han contribuido y de qué manera a alimentar la polémica.

“Es una presión para los 10 equipos", dice. “Pero hay algo un poco incómodo en Renault, me parece que tenemos que responder a esa pregunta mucho más. No es solo lo que estás preguntando, son todos. Y me pregunto por qué”, reflexionaba el galo.

“Hemos estado en F1 durante 42 años de alguna forma u otra. Acepto nuestra falta de coherencia, además de que ha habido algunas declaraciones y cambios de gestión. Entiendo todo eso. Pero la realidad es que estamos bien establecidos con dos fábricas [los motores están construidos en Viry-Châtillon, cerca de París], ahora somos un grupo de 1200 personas y estamos muy avanzados, no solo para este año sino para el próximo”, proseguía.

Respecto al nuevo acuerdo de la F1 sobre el techo presupuestario para 2021, Cyril cree que se está progresando bien.

“El nuevo Acuerdo Concorde está progresando en la dirección correcta y tenemos un conjunto de regulaciones que son muy positivas para nosotros. Direccionalmente, todo está bien.”

“Acepto que somos parte de una industria automotriz que está temblando, y eso también es cierto para Renault. ¿Pero realmente estamos luchando más que Daimler? No estoy seguro. El valor ya está aquí y solo será mejor en el futuro. Depende de nosotros cristalizar nuestro potencial, comenzando con nuestro rendimiento. Si nuestro rendimiento fuera mejor, tendríamos que responder a menos preguntas de este tipo ", afirmaba crítico el director deportivo de Renault.

Con respecto a la posible electrificación de la F1, Abiteboul cree que “no es un paso para la F1, porque necesitamos suficiente densidad de energía para correr 300 kilómetros a un nivel de rendimiento muy alto".

"Conectividad, electrificación, inteligencia artificial, eficiencia de combustible, estilo de vida ... Los biocombustibles están llegando, un primer paso en la dirección correcta, además de una serie de tecnologías que se están volviendo más relevantes para la fabricación de automóviles", añadía.

"En este momento, no hay nada en términos de tecnología de batería que pueda ofrecer la misma densidad de energía. La gran noticia para Renault a principios de este año son los automóviles PHEV. La electrificación y el motor de combustión interna son complementarios, no opuestos entre sí”

Ante la pregunta de que, si la F1 está en sintonía con un pensamiento automotriz más amplio, ¿por qué no se unen más fabricantes en vez de decantarse por la Formula E?

“Es un riesgo si no eres capaz de desempeñarte al nivel apropiado, un riesgo enorme. Ya en F1, tenemos críticas de que no pudimos luchar por P4 el año pasado, que es lo que creo que haremos este año. Pero P4 es todo un logro. Hay una serie de marcas, incluidas las más establecidas que están extremadamente bien financiadas, que ni siquiera se atreven a entrar en la F1 debido al riesgo asociado”, afirmaba.

Sin embargo, para el francés no todo es idílico dentro de la F1, pues para él, el techo de presupuesto lo considera “una lástima”, pues las últimas negociaciones del Acuerdo Concorde fueron “acuerdos bilaterales creados por Bernie Ecclestone para un propósito muy específico: dañar la F1.”, afirmaba.

Respecto a si la parrilla, de cara a 2022, se ajuste y Renault tenga oportunidades de luchar por podios, Abiteboul es optimista, aunque admite que el futuro de la marca del rombo en F1 pasa por ser competitiva.

“Por supuesto, no podremos escondernos para siempre", admite. “La expectativa tiene que ser realista y razonable. Pero sí, [en 2022] no podemos escondernos si no somos capaces de luchar por los podios. No esperamos dominar, pero el objetivo es luchar por los podios", expresó para finalizar.

Aunque aún no se sabe qué le deparará el futuro a Renault tanto dentro como fuera de la Fórmula 1, el fracaso del 2019 quedando por detrás de McLaren siendo los británicos un equipo cliente de su motor pone en tela de duda si la gestión de Abiteboul, así como la estructura interna del equipo son la más adecuadas para volver arriba de la tabla.

La posible marcha de Renault en los próximos años si su situación no mejora podría ser una explicación de la elección de McLaren de volver a ser motorizados por Mercedes en 2021.