Este pasado fin de semana el gobierno Italiano tomó la difícil decisión de bloquear o poner en cuarentena a 16 provincias para poder detener la propagación del coronavirus, debido a la gran rapidez de propagación que tiene dentro de Italia. Incluída en esta lista de provincias está la base de la escudería Ferrari, esto ha llevado a especular sobre si se le prohibiría la salida al equipo italiano con destino Australia para la apertura de la temporada este fin de semana.

El equipo ha confirmado que mientras algunos miembros del equipo ya están en Melbourne, hace algunos días y un grupo más del personal va en camino, otros miembros del equipo dejarán Italia en los próximos días. Se espera que para hoy lunes, el jefe del equipo, Mattia Binotto, junto con otros miembros de alto rango de la Scuderia, salgan de Italia con rumbo hasta Australia.

"Siguiendo las medidas anunciadas por el gobierno italiano anoche, estamos monitoreando y evaluando la situación y estamos en estrecho contacto con las autoridades relevantes y todas las organizaciones involucradas", dijo el equipo Ferrari en un comunicado, según Motorsport.it.

"Para Ferrari, el cumplimiento de las regulaciones gubernamentales representa la garantía principal para garantizar la seguridad de sus empleados y sus familias, que es nuestra prioridad", agregó. "Cada decisión se tomará con respecto a este principio".

"Parte del equipo y el equipo ya han llegado a Melbourne y las salidas para los miembros restantes del equipo continúan según lo programado, a menos que recibamos comunicaciones en contrario".

Por otro lado la escudería Alpha Tauri ha confirmado que su base no se ve afectada por las nuevas restricciones impuestas por el gobierno. Su personal ya está en camino a Australia y el equipo espera poder realizar un fin de semana con todo su personal completo. Al igual que Pirelli y Dallara, todos tienen el visto bueno para salir de Italia e iniciar la nueva temporada de F1.

Ahora toca esperar y ver como se verá afectado el campeonato, ya que en algún momento deberán regresar a Italia, y todo el personal de la F1 deberá obtener la salida para dirigirse a otra parte del mundo a disputar otro fin de semana de carrera. De momento la mañana de ayer, los organizadores del GP de Bahréin confirmaron que su carrera se celebrará a puertas cerradas con la prohibición de que los espectadores no puedan entrar al evento, en un intento por detener la propagación de COVID-19 o Coronavirus, convirtiéndose en el primer evento de F1 a puertas cerradas en su historia.

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