De la versión en inglés | Beatrice Zamuner, enviada especial

Charles Leclerc se retractó de sus palabras al final del Gran Premio de Singapur, en el que al inicio se sintió molesto por el exitoso undercut de Vettel.

Después de reducir la brecha en la general con Valtteri Bottas a 31 puntos. Leclerc señaló que seguirá apuntando a ser segundo en el campeonato. “Seguiré creyendo en reclamar el segundo lugar en la clasificación hasta el final. Daré todo hasta que las matemáticas digan que ya no es posible”.

Así mismo, resumió el GP de Singapur en lo inesperado que fue la ganancia para Ferrari: “Todos estábamos muy sorprendidos, especialmente en Singapur, una pista con alta carga aerodinámica. No pensamos en ser tan competitivos”.

Al tocar el tema relacionado con el team radio, Leclerc fue autocrítico; sin embargo, demostró que ya pasó el problema y aprendió de la situación.

“Creo que todavía necesito aprender, incluso después de ver la carrera me di cuenta que no debía reaccionar de esa manera en Singapur. La estrategia fue la correcta, lo más importante fue terminar primero y segundo para Ferrari. Las reglas son bastante claras, siempre son en beneficio del equipo. No hay cambios en esa parte”.

“En el auto siempre es muy difícil, hay mucha adrenalina. Me levanto por la mañana y me voy a dormir pensando en la victoria, así que a veces puede ser difícil, pero necesito controlarme, más en estas situaciones y actuar de manera más cortésmente. Aprenderé de esto e intentaré que no vuelva a suceder”, agregó.

El ‘mea culpa’ de Leclerc continúa, ya que declaró que su queja empeoró las cosas para Ferrari, tras el resultado de la carrera.

“Mirando la estrategia, nadie esperaba esa brecha de neumáticos, además Seb (Vettel) hizo una sorprendente vuelta de salida. Creo que no esperábamos que me pasara. La estrategia siempre es muy complicada en este tipo de situaciones y creo que lo hice aún más difícil para el equipo al quejarme”.

A pesar de demostrar que es un luchador en la pista, Leclerc señaló que debe trabajar un poco en su temperamento, especialmente para evitar tensiones en el equipo. El Gran Premio de Rusia será la ocasión perfecta para un nuevo comienzo y para ponerse a prueba sobre dicho asunto.