En el primer día de acción en la magnífica trazada mexicana Hermanos Rodríguez los dos autos de la escuderia austriaca fueron capaces de desenvainar una prestación super, aniquilando todos los demás. Increíble fue la facilidad extrema con la cual los monoplazas bajando en la pista podían marcar en el primer intento super cronos, a diferencia de todos los de más que sufrían con los neumáticos, incapaces de llevarlos en la correcta ventana de utilizo además de sufrir de una pista verde y sin adherencia.

Todas hechos que los dos autos de Milton Keynes no parecieron en ningún momento, demostrando una vez más la bondad de proyecto encabezado por Adrian Newey, que una vez más supo construir un chasis capaz de generar niveles de performances absolutos, gracias al extremo downforce que el auto puede ofrecer en cualquier tipo de condición. Sin olvidar la arquitectura genial de las suspensiones, que aparte hacer funcionar de manera brillante los compuestos proporcionan una tracción mecánica asombroso.

Efectivamente tener la cantidad correcta de carga aerodinámica y el adecuado agarre permite aprovechar de forma completa los neumáticos, algo donde evidentemente Ferrari y Mercedes aún carecen bastante, lejos todavía de una solución optimar como la de Red Bull.

Otro factor importante por analizar es la ubicación del circuito colocado a más de 2.200 metros con respecto al nivel de mar, lo cual como confirma el team manager Cristian Horner genera otra ventaja: "Lo dije de antemano…la gran altitud permite una cierta nivelación de potencia con respecto a las power unit de Ferrari y Mercedes. Además pienso que difícilmente ellos podrán utilizar toda la potencia con sus modos de clasificación, y sin duda alguna ese factor nos dará una gran oportunidad”.

Dentro de unas pocas horas veremos si la armada Red Bull podrá luchar de tú a tú con la escuderia alemana y aquella italiana, pero si algo es cierto es que el team de Milton Keynes quiere un papel de protagonista.