El paulatino y sólido ascenso de Honda
El pasado GP de México charlamos frente a frente con el actual líder del proyecto de la casa nipona.
2019 ha sido el año en que Honda ha dado un paso adelante; han dejado atrás el complicado regreso a la categoría que tuvieron de la mano de McLaren para conseguir en este año una posición de privilegio, dos victorias y cinco podios con su asociación al equipo Red Bull. Fue en Austria en donde Verstappen venció tanto a Mercedes como a Ferrari, desplegando un gran ritmo y potencia que sorprendieron a más de uno.
En la tarde del jueves 24 de Octubre después de su sesión con los medios japoneses, Toyoharu Tanabe, director técnico de Honda Racing F1, nos concedió unos minutos en la hospitalidad del fabricante en el Autódromo Hermanos Rodríguez.
Lo primero fue conocer la manera de abordar el progreso de la unidad de potencia:
“El enfoque es hacer una unidad de potencia fuerte. Fuerte significa fiable y con desempeño en términos de poder; ese es el enfoque.
“No tomamos un cambio drástico, corregimos algunas cosas o errores de la era previa, para mejorar el desarrollo”.
Mucho se ha hablado acerca del cambio desde la llegada a Toro Rosso el año pasado
“Mantuvimos el mismo estilo, no hubo cambios, ni en la manera de trabajar con el equipo. En términos técnicos seguimos igual, en lo político no lo sé pues no trabajé con McLaren”.
Tanabe-san conoce la categoría bastante bien, fue mecánico de Berger a inicios de los noventa además de estar involucrado en la segunda incursión de la marca cuando Button lideraba el proyecto. Por eso tiene bastante claro qué es lo que mantiene a la fábrica interesada en la categoría:
“La razón por la que participamos en esta reglamentación de las unidades de potencia en Formula 1 es por la eficiencia del motor de combustión y por el manejo de la energía. Esta tecnología no se aplica directamente a los autos de producción, pero hay tecnología clave que nosotros seremos capaces de usar en el futuro. No solo en los equipos físicos, sino también en los programas e información de operación para la gestión de la energía que se podrá explorar para los autos de calle”.
* Foto cortesia de Masahiro Owari
Después de un año de ajustes a nivel jerárquico en el que Toyoharu tomó el mando y se comenzó a trabajar con los equipos ligados a la firma austriaca de bebidas energéticas, es cuando se ve una progresión relevante. Cómo encara el reto en la actualidad, dónde ve la mayor área para mejorar:
“Creo que el componente de combustión es más grande que el eléctrico…(reflexiona un momento y añade) tal vez.
“Aún estamos aprendiendo en el lado eléctrico, como usarlo más eficientemente. En combinación con el motor (térmico), cuando cambias la manera de uso en el motor, más beneficios vemos en el lado eléctrico pero aún trabajamos en esa área.
“Algunas veces puedes encontrar algo aquí y lo podemos cambiar al otro lado, encontrar la mejor manera de ejecutarlo en pista; nosotros decidimos como usar eso”.
Constantemente se escucha a Max pidiendo por la radio que se le dé más poder a su auto en carrera, tratamos de entender como se trabajan estos puntos por parte de la marca japonesa.
“Tenemos que verlo con el piloto, como ellos quieren aplicar la potencia… principalmente el piloto (es) quien lo comunica al equipo basado en el comportamiento del chasis y después vemos la forma (curva) de la entrega de potencia”.
“En el pasado no había asistencias de la energía eléctrica, solo las características puras del motor y el conductor experimentaba unos pequeños brincos en la entrega de torque. Con las UP actuales eliminamos estos huecos, la entrega es más lineal, desde la perspectiva de ingeniería es más fácil hacer esa curva”.
Aun así no es tan sencillo de hacer funcionar las unidades de potencia en un equipo de F1, pues son muy complejas y requieren de atender muchos detalles.
“La UP actual, con el motor y la batería de alto voltaje es muy peligrosa, así que siempre nuestros ingenieros o técnicos cuida de ellas, de otra manera es casi imposible de manejar el auto”.
La noche se avecinaba y con algunas tareas previas aún por atender por parte del personal técnico de Honda, nos despedimos de nuestros anfitriones, quienes siempre se mostraron atentos y analíticos a nuestros cuestionamientos. Al salir se nos obsequió una lata de té frio japonés mientras Tanabe-san se dirigía al garage de Red Bull.