“Hace justo cuatro años aterricé en el Campeonato del Mundo con mis seis títulos de campeón de España. Todo el mundo ya me comparaba con la gran estrella Marc Márquez”. Así comienza este escrito con el que el nuevo piloto del Petronas Yamaha SRT ha querido hacer un repaso de su trayectoria deportiva, su llegada al mundial con tan solo 16 años y su paso por las categorías de Moto3 y Moto2, y por supuesto, como afronta este nuevo reto en la categoría de mayor cilindrada.

Tal y como el propio Fabio escribe, su nombre sonaba muy fuerte allá por 2015, cuando llegó al Mundial con nada más y nada menos que seis títulos de Campeón de España bajo el brazo. Frases desde “Una gran promesa del Motociclismo” hasta “El posible sucesor de Marc Márquez” que se le llegaron a atribuir por entonces a un niño, ya que ni siquiera alcanzaba la mayoría de edad.

“Mi debut fue bastante prometedor. Segundo en Austin en mi segunda aparición en un Gran Premio. Pude repetir ese resultado en Assen, mientras aparecía de forma habitual en el Top 10. Pero con sólo 16 años es fácil que te afecte la presión y eso es exactamente lo que pasó en mi caso. Para empeorar las cosas, una lesión en mi tobillo derecho, consecuencia de una caída en Misano, hizo que me perdiera cinco carreras... A partir de entonces, las cosas se complicaron un poco más para mí”. Sus tres primeros años en el mundial no fueron del todo fructíferos, y no cumplieron las altas expectativas que se le otorgaron, pero la pasada temporada consiguió en un Gran Premio que le toca de cerca, el GP de Catalunya, la victoria que le impulsó y recompensó todos los malos tragos sufridos los años anteriores.


“En 2018 pude encontrar un respiro y, a partir de ahí, todo siguió su curso. A principios de julio, mi agente me dijo que podríamos tener la oportunidad de ir a MotoGP. Justo venía de firmar dos carreras muy buenas, ¡lo que me había devuelto la confianza! Estaba sorprendido y muy emocionado al mismo tiempo... sin olvidar que tenía que guardar todo esto en silencio. El proyecto finalmente se concretó y hoy estoy aquí: ¡en la piel de un piloto MotoGP!”, relata Fabio.
Afirma también en esta carta abierta, estar gratamente agradecido a Petronas, el Sepang Racing Team, Yamaha y a su familia, por brindarle el apoyo y apostar por él, y promete hacer todo lo que esté en su mano por honrarles.

El primer contacto con su nueva moto se produjo en los test de Valencia del pasado año, cuando un día antes se cerró la temporada 2018. Un momento especial que describía así: “Desde que me subí por primera vez a la M1 en Valencia, he estado viviendo un sueño despierto. Mi adaptación está lejos de haber terminado, pero llegará 'paso a paso', como se suele decir. No tengo ninguna duda sobre el potencial de esta moto y también tengo la suerte de estar muy bien rodeado”.  Adaptación que quedó más que confirmada hace apenas dos días, durante la última jornada de test oficiales en Qatar, donde demostró el potencial del combo que forman él y la Yamaha, posicionándose como el segundo más rápido del día, detrás del piloto oficial de la escudería de Iwata, Maverick Viñales. Desde Yamaha ya confirmaron que el piloto de Niza correría también con una M1 de este año, pero con menos revoluciones que sus compañeros de marca.

Quedó demostrado que al rookie francés no le faltan armas para luchar por hacer un buen primer año en la categoría mas fuerte y exigente, y consciente de ello se ha esforzado mucho físicamente durante el periodo invernal y así lo confesaba: “Por mi parte, trabajé duro este invierno. Una cosa es cierta, detrás de mi mirada a veces relajada, no me falta ambición y he aprendido mucho del pasado. No dejaré que la presión me vuelva a afectar. Puede que no haya visto el primer título de Valentino Rossi, pero la edad no lo es todo en MotoGP… ¡y quiero demostrar lo que puedo hacer con 19 años!”. El trabajo de pretemporada ya está hecho y a penas le quedan 8 días para medirse oficialmente en el primer GP de la temporada que se celebra la próxima semana bajo los grandes focos que iluminan el trazado asiático.