Cal Crutchlow, piloto de LCR Honda Castrol, llega al parón de verano con  una temporada de altibajos. Empezando en Qatar, la primera carrera del año, Cal supo cómo gestionar la carrera y saliendo sexto en parrilla consiguió acabar con un podio en la tercera posición, empezando la temporada con muy buen ritmo. En la segunda cita del mundial, el piloto británico, saliendo octavo, no pudo conseguir más que una decimotercera posición en Argentina, que comparándola con la caída que sufriría en Austin, fue una muy buena posición. En Austin, Cal hizo la mejor clasificación de la temporada (hasta ahora) y salía tercero, pero cometió un error que le hizo irse al suelo en la quinta vuelta y por tanto, se fue del circuito de las Américas sin ganar ningún punto. En el primer circuito español de la temporada, Cal cruzó la meta octavo y se mantuvo con estas posiciones en Francia e Italia donde acabó noveno y octavo respectivamente. Volviendo a España, en el Catalan GP, el piloto de Honda volvió a cometer un error que le llevó a una caída por lo que no consiguió puntuar en esa carrera. En Assen volvió a la regularidad y se quedó con la séptima posición pero en Sachsenring, pudo volver a demostrar su potencial consiguiendo como en la primera carrera de esta temporada la tercera posición del podio y cerrando así la primera mitad de la temporada con muy buenas sensaciones sobre la Honda.

Cal Crutchlow, con 67 puntos, se sitúa dentro del top10 en la novena posición de la clasificación general del mundial pero aún le queda la mitad de la temporada para poder mejorar esa posición en su novena temporada en la categoría reina. Según ha dicho el piloto Británico de Honda, uno de sus objetivos para la vuelta de las vacaciones es convertirse en el piloto satélite más fuerte. Por el momento, Jack Miller ostenta esta posición con una ventaja de tres puntos sobre Fabio Quartararo y el propio Cal Crutchlow en lo que será un duelo muy intenso.