El número 30, miembro del equipo LCR Honda IDEMITSU ha demostrado el pasado domingo la evolución que ha conseguido mientras permanecía luchando en la pista de Termas de Río Hondo hasta el último momento de la carrera.

Desde el noveno puesto en la parrilla, Nakagami hizo lo posible para mantenerse en contacto con el segundo de la lucha: Marc Márquez. El piloto japonés tuvo problemas de agarre con un neumático trasero blando en la carrera. Aún así, luchó contra el piloto de Yamaha, Maverick Viñales, piloto que resistió hasta su choque junto al italiano Franco Morbidelli en la última vuelta, permitiéndole a Taka subir dos puestos y conseguir un mejor resultado.

"Estoy muy contento con el resultado de hoy”- reconoce el japonés- “La carrera fue bastante difícil porque elegí el compuesto trasero suave ya que quería intentar empujar hacia el frente después de la salida. Pero luché por encontrar un agarre desde el principio y fue una carrera exigente para mí" informa.

Por último reconoce que intentaron dar lo mejor en la carrera del pasado domingo. “Estoy feliz de terminar P7, que es mi mejor resultado en una carrera en seco, y realmente quiero agradecer al equipo que hizo un gran trabajo este fin de semana” afirma.

El número 30 reconoce que el equipo está trabajando y quiere llegar ya al mundial de Texas- Circuito de las Américas- donde esperan poder dar un paso más.