Kevin Magnussen partía en séptima posición en el Gran Premio de Australia, por lo que Haas (Romain Grosjean salía sexto) estaba bien colocado para coger unos buenos puntos en el Circuito de Albert Park. Sin embargo, el francés tuvo que abandonar por el mismo problema que el año pasado, una tuerca mal ajustada.

Esto permitió que el danés finalizara sexto, siendo el mejor de la zona media de la parrilla: “Estoy muy contento hoy, ha sido un buen resultado”, dijo un feliz Magnussen, aunque se siente mal por su compañero: “Obviamente estoy triste por el equipo por no tener ambos coches llegando a la meta, seguramente Romain también habría estado en una buena posición, especialmente después de que ambos tuviéramos una clasificación tan buena ayer, así que estoy destrozado por su lado”.

Magnussen sabe de la importancia de estos puntos y se mostró feliz por el comportamiento del coche durante la carrera: “Ser sexto para mí está muy bien, estoy contento con el día de hoy - a lo que añadió - hice una buena salida y tuve un buen coche desde allí, pude empujar toda la carrera y cuidar mis neumáticos, estoy muy feliz de comenzar el año de esta manera”, finalizaba Magnussen.

Tras un 2018 en el que pudo ser el cuarto equipo, este año no quieren que se les escape de las manos dicha oportunidad, han mostrado solidez a lo largo del fin de semana y parece que la escudería estadounidense ha aprendido de sus errores, a excepción de la “tuerca maldita” de Australia.

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