Al Khalifa admite problemas en el desarrollo del MCL-33 y miran con optimismo al MCL-34.
Tras los problemas que el equipo británico ha experimentado esta temporada en cuanto a evolución del monoplaza, uno de sus máximos inversores señala que no se logró una buena correlación de datos entre el coche y el túnel del viento en el MCL-33 y que están trabajando muy duro para que no se repita en el futuro MCL-34.
Todos sabemos la mala temporada que ha realizado el equipo McLaren, comenzando de una manera positiva en las primeras carreras, pero la nula evolución del monoplaza a partir del Gran Premio de España ha hecho que la escudería de Woking hayan retrocedido posiciones en la parrilla hasta terminar luchando con los Williams para no ser el peor equipo en la parte final del campeonato, sacando solo 62 puntos y un quinto puesto de Fernando Alonso en Australia como mejor resultado.
Sheikh Mohammed Al Khalifa, uno de los mayores inversores del grupo McLaren, admitió que separarse de Honda el año pasado fue "una decisión costosa", pero especificó que se necesitaba actuar para lograr mejorar el largo plazo para la escudería y para la empresa en sí: “Tenemos un enorme respeto por Honda, pero la relación no funcionó, por lo que tuvimos un argumento coherente para decidir separarnos".
El año que viene, McLaren necesitará una remodelación para poder mirar hacia arriba y mucho trabajo les espera por delante y Honda, que pasó al grupo Red Bull, apunta a pelear en las primeras posiciones y por el Mundial en 2020 después de una temporada de prueba con el equipo B del grupo, Toro Rosso. Doce meses en los que preparó una buena base “esperando cosechar buenos frutos en 2019, pero especialmente en 2020”.
Los problemas que tenía el MCL-33 obligó a McLaren a revisar el proceso de diseño interior del coche y reemplazar las cumbres técnicas y organizativas que lo habían desarrollado en 2018 en busca de solucionar el problema para el coche del año que viene. Al Khalifa también es el accionista mayoritario del fondo de inversión Mumtalakat, propiedad del Gobierno de Bahrein. Su punto de vista sobre el futuro es bastante optimista: "Confiamos en que hemos entendido por qué no hemos podido desarrollar el automóvil de este año. Hubo un problema clave y creemos que hemos trabajado lo suficiente para resolverlo. No queremos revelar lo que descubrimos para dar pistas a nuestros rivales , pero hemos tomado medidas y el desarrollo del coche de 2019 nos ayudó a comprender qué fue lo que salió mal el año pasado".
Luego, el accionista recalcó que no se dieron cuenta de que los datos del túnel del viento y del monoplaza no correspondían hasta después de las vacaciones de verano: “En abril teníamos la esperanza de que podíamos tener una especificación B del monoplaza durante la temporada, pero los errores en la correlación de datos nos lo impidió ". El propio Al Khalifa confirmó que Mumtalakat tuvo que aportar fondos adicionales a McLaren para cubrir las pérdidas de la ruptura con Honda, comprometiéndose a largo plazo con el equipo de Fórmula 1.