Fernando Alonso concluyó la segunda sesión de entrenamientos libres en 13ª posición. El piloto asturiano completó 35 vueltas, más o menos lo normal por todos los participantes en esta sesión, y terminó con un registro de 1:38:725, con más de un segundo de ventaja sobre su compañero, aunque eso no suele ser relevante en este tipo de sesiones. El asturiano, quien estrenó un casco especial para la ocasión, y una nueva cámara que enfoca directamente a su cara, está viviendo sus, a priori, últimos momentos en la Fórmula 1.

Tras bajarse del monoplaza, el bicampeón español pasó por los micrófonos para hablar de varias cuestiones: “Está siendo un día acompañado y con más calor y cariño fuera del coche del habitual. En cambio, una vez que estoy dentro del coche todo ha sido normal. Durante los primeros libres hemos probado cosas respecto al monoplaza de 2019, mientras que en la segunda sesión nos hemos centrado en analizar el comportamiento de los neumáticos”, explicó Alonso. “Sólo esta sesión es en las mismas condiciones que la clasificación y la carrera, así que la hemos intentado aprovechar al máximo. Creo que hemos recogido datos e información muy útil”, apuntó.

De cara a mañana, Fernando no parecía tener muchas ilusiones: “Los rivales suelen guardarse algo hoy, por ello creo que mañana estaremos más atrás. Leclerc, Pérez, etcétera, que están por detrás, mañana deberían quedar delante de nosotros. El domingo intentaremos aprovecharnos de una carrera loca y recuperar posiciones, aunque conocemos nuestras limitaciones”, comentó el piloto español.

Zak Brown, jefe de McLaren comentó este fin de semana su deseo por contar con el apoyo de Fernando de cara al desarrollo del monoplaza el año que viene. Ante esta proposición, Alonso se mostró receptivo: “Mi habitación está con la puerta abierta siempre, pero tendré que ver la disponibilidad que tengo.. Si puedo ayudar al equipo, a Carlos, y las condiciones me interesan ,lo aceptaré. Saben que voy a ser parte del equipo el año que viene. Voy a correr con McLaren las 500 millas, voy a estar en la fábrica… No es un adiós definitivo”, finalizó el ovetense.