En los últimos días, Otmar Szafnauer (jefe del equipo Force India) declaró que la escudería perseguirá un objetivo más ambicioso: “Queremos luchar por el tercer lugar. Creo que nosotros y Renault tenemos la oportunidad de acercarnos a Ferrari y Mercedes en 2019”. Con esta frase destapa una interesante declaración de intenciones.

Es interesante por muchos aspectos, uno de ellos es la sorprendente recuperación de confianza por parte de Force India después de un agosto negro. El equipo estaba en una situación límite, al borde de la desaparición, además de la posibilidad de no disputar el Gran Premio de Bélgica en Spa. Pero en los últimos momentos, cuando todo parecía perdido, surgió el milagro: “Sin el ingreso de Lawrence Stroll, no habríamos llegado a la carrera en agosto”, declaró Otmar Szafnauer al portal brasileño Globo. Lawrence Stroll, padre del piloto canadiense Lance, compró la escudería con ayuda de su consorcio, salvando 405 puestos de trabajo en la fábrica y con el compromiso de saldar la deuda con los acreedores del equipo.

Un segundo aspecto es la posibilidad de que se cumpla el objetivo. Un detalle importantísimo para el desarrollo del monoplaza y del equipo es una elevada inversión, algo que piensa hacer el nuevo dueño: “Quiere acelerar el crecimiento del equipo al máximo para llegar a los tres primeros que dominan" comentó un ilusionado Szafnauer que detalló que se cambiaría el nombre del equipo y se construiría una fábrica en el futuro, aunque aún hace falta abordar varios asuntos.

Sin embargo, una fuerte inversión en la escudería no garantizaría un buen rendimiento, solo hay que ver el caso de McLaren, es necesario que esa inversión se utilice de forma eficiente, cualidad muy bien desarrollada por Force India desde su incorporación al gran circo en 2008.

Un último aspecto a tener en cuenta son los factores internos y externos. El más relevante de todos a nivel interno es quién acompañará al mexicano Sergio Pérez para lograr la ansiada tercera posición en el mundial de constructores. Es un secreto a voces que será el hijo del nuevo dueño, Lance Stroll, un piloto que no ha mostrado grandes destellos en estas dos últimas temporadas en Williams. Entre las consecuencias  externas destaca la relación Red Bull-Honda, ambos esperan para la próxima temporada mantener esa tercera plaza, e incluso luchar con Mercedes y Ferrari. Force India estará atenta en cada detalle a esta nueva alianza que, como cualquier asociación puede ser un desastre o un acierto. Tampoco se puede olvidar a Renault, dispuesta a enseñar sus grandes progresos el próximo año.

Si la temporada 2019 estaba siendo interesante tras la batalla entre Mercedes y Ferrari en 2018, lo será aún más por ver quién ocupará esa tercera posición. Force India lo tiene complicado, el dinero no lo es todo, y tendrán que mostrar más que nunca sus fortalezas. 2019 puede ser un año para cambiar su historia.