Se necesita reducir el tiempo de los entrenamientos libres en la Fórmula 1
Tras lo visto en el gran premio de Estados Unidos, y con un fin de semana donde los entrenamientos libres no tuvieron la misma importancia debido a la lluvia nos hace preguntarnos lo siguiente. ¿Realmente necesitamos tener cuatro horas de entrenamientos libres en los grandes premios?
El Gran Premio de Estados Unidos fue sencillamente impresionante. Tensión, nervios, adelantamientos, polémica, estrategias… Todo lo que puede tener una carrera, que podemos definir en una palabra: Imprevistos. La lástima es que esta palabra no se vea más a menudo en las carreras, pero una de las razones de que las carreras sean muy previsibles son los entrenamientos libres, el tema protagonista de este artículo.
Los viernes siempre han sido el día de probar los coches, dar la oportunidad a algunos pilotos jóvenes de acumular experiencia y probar las evoluciones que traen los equipos durante la temporada. Concretamente estas premisas se suelen ver en la primera sesión de los entrenamientos libres de cada gran premio. La segunda sesión de entrenamientos libres se usa para obtener información del coche a una vuelta, pero, sobre todo, para ajustar el monoplaza a las tandas largas y nivel de degradación para preparar la carrera. Y la tercera sesión, ya disputada el sábado, se usa para preparar la clasificación de unas horas después. Y ahora viene la pregunta. ¿Realmente es necesario tener tanto tiempo de pruebas?
Bajo mi punto de vista, se necesitaría reducir considerablemente el tiempo de los entrenamientos libres. No es bueno para la competición tener cuatro horas de pruebas en cada gran premio, ya que, con la avanzada tecnología que tienen los equipos, pueden monitorizar y sacar todo el rendimiento de los coches y de los neumáticos, lo que convierten las carreras en demasiado previsibles con tantos datos. Otro punto que tiene en contra es el kilometraje en las unidades de potencia, ya que estamos con muchas limitaciones en los componentes (dos o tres repuestos por temporada, lo cual es demasiado conservador) y los equipos (sobre todo en esta parte final de temporada) salen menos para no gastar condición de coche. Y por último, se crea un gasto importante en los equipos que no se rentabiliza de una manera clara.
Mi idea sería reducir de cuatro a dos horas los entrenamientos libres, y pasar de tres a dos sesiones de entrenamientos libres. Estas se celebrarían solo el viernes, dejando el sábado solo centrado en la clasificación y el domingo en la carrera, y crear algo más de incertidumbre. Y el tiempo que se quite de pruebas se emplearía en ampliar los test de pretemporada y para crear más eventos para los aficionados, como permitir a los pilotos reserva explicar y enseñar al público su trabajo y su preparación en su puesto en un equipo de Fórmula 1 y que puedan realizar exhibiciones en el propio circuito con coches deportivos. Y por último, dejar a los aficionados poder visitar toda la pista dentro de ella como los domingos después de la carrera.