La FIA ha salido en defensa del safety car, rechazando por completo las críticas recibidas durante el Gran Premio de Australia, donde los pilotos se quejaron abiertamente sobre la escasa velocidad del Aston Martin en pista, lo que para algunos supusieron ciertos problemas de temperatura en sus neumáticos.

La FIA llevará para esta temporada dos monoplazas que se irán repartiendo los Grandes Premios, como ya hizo la temporada pasada. Durante las dos primeras carreras de la temporada fue un Mercedes-AMG GT Black Series, sin embargo en el Gran Premio de Australia llegó el turno del Aston Martin, modelo Aston Martin Vantage lo que ha desencadenado el enfado de los pilotos por la diferencia de velocidad entre ambos monoplazas.

Las críticas más destacadas fueron las del vigente campeón del mundo, Max Verstappen: “el coche de seguridad conducía tan lento que era como una tortuga. Increíble".

"Seguro que el coche de seguridad de Mercedes es más rápido debido a la aerodinámica extra, porque este Aston Martin es realmente lento. Definitivamente necesita más agarre, porque nuestros neumáticos estaban fríos como la piedra", añadió Max Verstappen.

Sin embargo, no ha sido el único piloto que ha hecho oír sus protestas, George Russell señalaba la diferencia entre ambos modelos: “No tenemos el problema con el Mercedes AMG Safety Car. Hablando en serio, el Mercedes AMG es como cinco segundos mucho más rápido que el Aston Martin Safety Car, lo cual es bastante sustancial”.

Incluso el ganador de la carrera, Charles Leclerc, señaló las dificultades que tenía el Aston Martin Safety Car para alcanzar el ritmo que llevaba, siendo esta insuficiente para mantener los neumáticos en temperatura: “Para ser honesto, quería quejarme, pero luego comprobé cuánto patinaba el coche de seguridad en la curva y no creo que pudiera dar nada más, así que no quería presionar demasiado. Es la forma en que es. Pero seguro que con los coches que tenemos ahora es muy difícil mantener la temperatura en los neumáticos detrás del coche de seguridad".

No obstante, la FIA ha rechazado rotundamente las quejas, alegando que la finalidad del safety car no es la velocidad, si no la seguridad en pista, además de ayudar a los oficiales a restablecer la carrera de una manera segura.

“A la luz de los comentarios recientes sobre el ritmo del Safety Car de Fórmula 1 de la FIA, la FIA quisiera reiterar que la función principal del Safety Car de Fórmula 1 de la FIA no es, por supuesto, la velocidad absoluta, sino la seguridad de los conductores alguaciles y funcionarios”, escribió la FIA en un comunicado en Twitter.

FIA Statement on @F1 Safety Car pic.twitter.com/5p0uHGo6mu

— FIA (@fia) April 14, 2022

“Los procedimientos del coche de seguridad tienen en cuenta múltiples objetivos, según el incidente en cuestión, incluido el requisito de 'agrupar' el campo, negociar la recuperación de un incidente o escombros en la pista de manera segura y ajustar el ritmo según las actividades de recuperación que puede estar en curso en una parte diferente de la pista”, proseguía el comunicado.

“Por lo tanto, la velocidad del coche de seguridad generalmente está dictada por el control de la carrera y no está limitada por las capacidades de los coches de seguridad, que son vehículos de alto rendimiento hechos a medida preparados por dos de los principales fabricantes del mundo, equipados para hacer frente a las condiciones cambiantes de la pista en todo momento y conducido por un piloto y un copiloto muy experimentados y capaces”, continuaba.

“El impacto de la velocidad del coche de seguridad en el rendimiento de los coches que le siguen es una consideración secundaria, ya que el impacto es igual entre todos los competidores que, como siempre, son los responsables de conducir de forma segura en todo momento según a las condiciones de su coche y del circuito”, finaliza así el comunicado.

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