La escudería Red Bull Racing Honda recupera una pieza clave en su organización. Adrian Newey, ingeniero jefe del equipo, regresa a la competición tras haber sufrido un accidente de bicicleta a principios de año que le imposibilitó ejercer su profesión.

Así, tras pasar por varias operaciones, Newey vuelve a ponerse manos a la obra para encontrar las debilidades del RB16B. El británico tendrá además una reunión próximamente con Max Verstappen para encontrar los problemas que surgieron durante el Gran Premio de Turquía, donde los Mercedes fueron claramente superiores.

"Estamos bien posicionados, pero Newey es claramente nuestra figura clave. Su ausencia en las primeras carreras de la temporada se debía a que no sabíamos cuán seria era su lesión. Tuvo que pasar por varias operaciones", explicaba Helmut Marko, asesor de pilotos de Red Bull.

Marko reconoce que Newey todavía no está completamente recuperado de sus lesiones, pero sí puede ir haciendo ya su trabajo, que tanto se ha notado en la escudería.

“Por ahora no está completamente en forma, pero sí listo para hacer su trabajo. Reconoció de inmediato las dificultades que tuvimos en Turquía en términos de puesta a punto”, continuaba Marko.

Lo ocurrido en Turquía desveló algunas debilidades del RB16B durante su puesta a punto en el circuito. Verstappen y Pérez terminaron segundo y tercero respectivamente, finalizando Bottas por delante con una clara ventaja, lo que hizo que saltaran las alarmas en Milton Keynes.

No obstante, Marko ha asegurado que habrá una reunión entre Max Verstappen y Adrian Newey la próxima semana para atar cabos sueltos y refinar detalles del monoplaza.

“Habrá una reunión con Verstappen la próxima semana en Milton Keynes para que estemos de nuevo a la altura en términos de coche”, finalizaba Marko.