La rivalidad entre Mercedes y Red Bull está yendo más allá de la pista; y no es para menos, ambas escuderías buscan conquistar este año la Fórmula 1, por el lado del equipo alemán, el objetivo es lograr conseguir su octavo título de campeones, mientras que por el lado de la escudería austriaca, su intención es lograr su primer título con Max Verstappen (quinto para el equipo).

Actualmente Red Bull lidera contundentemente el campeonato de constructores con 44 puntos de ventaja sobre el equipo teutón, quien ha tenido dificultades para encontrar un ritmo de competencia efectivo para frenar el poderío de la escudería del toro. Para Christian Horner jefe de equipo austriaco, la fuerte rivalidad entre ambas escuderías, ha dejado a Mercedes en una posición incómoda y desesperada, especialmente a Toto Wolff CEO del equipo alemán; donde se ha visto que han trabajado bajo presión en nuevas actualizaciones para contrarrestar la efectividad y control del equipo de bebidas energéticas. 

Según Horner, los alemanes no enfrentaban desde el 2014 un rival tan sólido y contundente en pista como lo está haciendo Red Bull este año, obligando a Mercedes a salirse de su zona de confort y perder el control sobre la competencia: "Es una dinámica que Toto probablemente no haya experimentado antes porque se unió al equipo cuando ya estaba asentado. Ésta es la primera vez que muchas personas del equipo se encuentran en esta posición", ha añadido el jefe británico para The Guardian.

Horner además también afirma que en la posición que ambos ejercen en la Fórmula 1, es normal querer manejar cierto control sobre el equipo, resultados, declaraciones, además de la importancia del juego psicológico en la competencia para manejar a sus rivales, sin embargo el britanico también cree que Wolff es un ‘maniático del control’ que se encuentra algo exasperado por la situación actual del equipo actual, que es poco favorecedora para el siete veces campeón de la categoría.

"Es una profesión competitiva y Toto es un maniático del control, como se puede observar, y lo que no puede controlar es Red Bull, probablemente soy el único que no tiene conflictos de interés con Toto, puedo darle mi opinión y decirle lo que pienso. Es posible que eso le incomode un poco ", ha asegurado el jefe del equipo austriaco.