Racing Point ha sido protagonista de una de las polémicas del año 2020 en la Fórmula 1, a raíz de la sinuosa similitud entre el RP20 y el W10 de 2019 del equipo Mercedes. A pesar de ello, y de jugar en contra del reglamento, el equipo rosa sigue utilizando el mismo diseño, con una sanción de los 15 puntos conseguidos en el Gran Premio de Estiria, la segunda carrera en el Red Bull Ring.

Siguiendo con dicha controversia, la FIA introdujo nuevas reglas para la temporada 2021, en las que se busca terminar con la denominada ‘ingeniería inversa’ pero, ¿realmente funcionará? ¿Seguirá habiendo equipos que busquen ‘más allá’ del límite del reglamento?

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Sobre este tema ha hablado James Key, el director técnico del equipo McLaren, quienes son rivales directos de Racing Point (junto con Renault) en la lucha por la tercera posición del Campeonato de Constructores. Key está confiado de que las nuevas reglas serán un paso significativo hacia adelante, en la dirección correcta. No obstante, como explicó en una entrevista para el medio RaceFans, cree que parte del problema viene de la estrecha relación de colaboración que existe actualmente entre distintos equipos.

“Siempre hay más alcance con esto, es tremendamente complejo. Por ahora, la redacción que tenemos deja muy claro que no se puede repetir lo de este año. Sería demasiado obvio. Claramente no es lo correcto [copia]. Todos estuvieron de acuerdo en que es bueno para el deporte tener ese nivel de detalle, ahora que las tecnologías permiten una copia más cercana de las superficies” explicó Key para el portal antes nombrado.

En la lucha por superarse, los equipos traen varias actualizaciones durante el año, de distintos tamaños e impacto en el chasis. En el caso de McLaren, su actualización más pronunciada en el MCL35 es la nueva nariz del alerón delantero que, desde fuera, es similar al diseño utilizado por varios equipos. A pesar del parecido, James Key asegura que pueden demostrar que es un diseño propio.

“Es nuestra nariz, la desarrollamos desde los primeros principios. Obtuvimos una idea de alguna parte pero, en términos de entenderla, diseñarla, probarla, pasar el test de impacto, y todo lo demás, todo es absolutamente propiedad intelectual de McLaren” explicó el inglés.

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El jefe técnico del equipo de Woking espera que las futuras versiones de las reglas deberán dibujar una distinción compleja entre los equipos que copiar de diseños rivales, y quienes desarrollan sus propias versiones de filosofías ajenas.

“Todavía hay niveles que deben ser considerados más a fondo. Sé que la FIA ha tratado de abarcar tanto como fue posible en un corto espacio de tiempo, y han hecho un gran trabajo. Pero no se trata solo de lo que ves en una imagen; si fuera así de simple, probablemente todos nos veríamos mucho más similares ahora.” expone Key.

En pro de asegurar que un equipo no ha copiado a un rival, el encargado de regular debe conocer y corroborar en algo más que un examen físico de las partes a tratar: producción, rendimiento, etc...

“No es como se ve, ese es el resultado final de la IP; no es un dibujo ni un diseño modelo 3D, eso también es la parte final de la IP. La generación de la IP comienza con múltiples opciones y oportunidades, y se reduce a uno” comenta. “Tiene que ser compatible con el resto del coche; tiene materiales, simulaciones, pruebas I+D...Es decir, pasa por una gran cantidad de diferentes actividades antes de terminar con un diseño que puedas ver. El producto final no es la IP, es todo el trabajo de antemano, y eso es lo que hacen los equipos. Por eso se emplea a tanta gente, y es lo que hay que proteger, pasar de los primeros principios”.

Para terminar, el director técnico de McLaren espera que las futuras regulaciones vayan más allá del mero hecho de copiar y, en el futuro, se opte por proteger a los equipos cuyo diseño y desarrollo del F1 sea propio.

“Sería bueno tratar de estirar más esta redacción para llegar al punto en el que puedas decir cómodamente ‘sí, eso es desde los primeros principios’, incluso si se basa en alguien más o es una innovación completamente nueva. Sabemos que la IP es 100% suya y ellos deben hacerla funcionar en su derecho propio”.

“Lo que no puedes parar son las discusiones de ‘máquina de café’; cualquiera puede ponerse a charlar tranquilamente sobre ello. Los equipos no solían colaborar como nosotros. Solo fue algo surgido en la última década. Todo el mundo era increíblemente reservado hace más de 10 años. Así que sería bueno volver a eso, porque de eso se trata la competencia, para mí” concluyó Key.

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