Vuelta 50 del Gran Premio de Emilia Romagna. Max Verstappen instalado en ese momento en la segunda posición tras haber rodado por 32 giros con neumáticos duros, abandona la competencia luego de que su neumático trasero derecho explotó en la frenada yendo a Tamburello. En ese momento, Sergio Pérez subía a la tercera posición con 12 vueltas por cumplir en sus neumáticos duros de 23 giros. Haciendo números, si Pérez no hubiera parado, llegaría a la meta con 37 vueltas en esas llantas con las que estaba marcando un gran ritmo vuelta a vuelta.

Pirelli aseguraba en la previa que los neumáticos duros podrían ir hasta 37 vueltas. Bernie Collins, jefa del departamento de estrategia de Racing Point junto con sus ingenieros, mandaron llamar a Checo a los pits para ponerle un juego de suaves nuevos para cerrar la competencia ante quizá, el temor de sufrir el mismo problema de Verstappen, pero eso no lo sabremos.

Lo que viene a echar todo a perder es que durante esas 50 vueltas realizadas de las 63 que se iban a dar, hubo muy pocos rebases en general. Pérez no pudo pasar a nadie en pista y solo con un gran trabajo con sus llantas medias en el primer stint de 27 giros, hizo que pudiera pasar en pits a Norris, Leclerc, Kvyat, Ricciardo, Albon y Sainz. Por el abandono de Gasly, había subido 7 posiciones del 11 al 4°.

El mexicano luego de su pitstop, enfrentaría a tres pilotos que estaban jugando a una estrategia distinta. Vettel, Raikkonen y Latifi. El de Williams entraría en la vuelta 34 y le dejaba el camino libre a Pérez para ir por Raikkonen y aquí es donde está la clave de todo. En la vuelta 43 ya estaba en el ala trasera de Raikkonen quien se defendió por 5 vueltas del ataque de Pérez quien contaba con neumáticos duros nuevos, pero ya con 16 vueltas, y el finlandés montaba medios de 43 giros… Con esa diferencia de armas, Pérez no pudo rebasar a Raikkonen y era un indicio de que era muy poco probable que se dieran oportunidades para rebasar.

En el momento del abandono de Verstappen, Collins quizá se pudo haber dejado ir por la estrategia de Mercedes que paró a Bottas quien tenía 36 segundos de ventaja sobre el mexicano para ponerle llantas suaves usadas, pero eran 36 segundos de distancia, contrario a Pérez quien solo tenía 14 segundos sobre Ricciardo y el australiano tenía ya 37 giros en esos duros, decidiendo ir por todo para cerrar la carrera con esos neumáticos con 12 giros por cumplir. Luego incluso Hamilton paró una vuelta después también para poner suaves usados, pero, repito, son los Mercedes con toda una vida de ventaja sobre sus rivales.

Luego de que acaba la carrera y que uno tiene todos los números, es complicado afirmar que en Racing Point tomaron la decisión correcta. En esta ocasión, querer seguir la estrategia de los líderes resultó en un error, y además, el usar los neumáticos suaves nuevos no era la mejor decisión.

Sergio pierde con ello su primer podio del 2020, y también una nueva oportunidad para despedirse de este equipo con un resultado que calle la boca de quienes tomaron la decisión de darle las gracias para decantarse por Vettel hace casi dos meses.

Un día muy duro para nuestro equipo, teníamos el podio en la bolsa, pero así es nuestro deporte.
Como equipo perdemos y ganamos juntos, ¡fue un carrerón! ¡Regresaremos más fuertes! 💪 #ImolaGP pic.twitter.com/wk29S73Y3v

— Sergio Pérez (@SChecoPerez) November 1, 2020