Según publica RaceFans, Stefano Domenicali, quien fuera jefe de Ferrari entre 2008 y 2014, será el nuevo CEO de la Fórmula 1 sustituyendo a Chase Carey. De esta forma, el italiano regresa al Gran Circo tras ser director de la comisión de monoplazas de la FIA, además de pasar por Audi y Lamborghini.

Carey renunciará al cargo de CEO que asumió en enero de 2017, cuando Liberty Media adquirió los derechos de la Fórmula 1. Recientemente, supervisó las exitosas negociaciones para extender el Acuerdo de la Concordia con las diez escuderías del campeonato, siendo su última labor como CEO. Se espera que Carey mantenga algún vínculo con la F1 desde un rol externo y se desconoce si aún conservará su puesto como presidente de la Fórmula 1.

El nombramiento de Domenicali hará que los principales cargos estén ocupados por exjefes de Ferrari. Jean Todt es presidente de la FIA desde 2010, aunque no optará a la reelección el próximo año; mientras que Ross Brawn regresó al Gran Circo como director deportivo en 2017, tras la adquisición por parte de Liberty Media. El italiano podría asumir el cargo antes del inicio de la próxima temporada.

Algunos entendidos de la Fórmula 1 han manifestado que este nombramiento ha sido un acierto por parte de Liberty Media. Sin embargo, hay quien duda de la parcialidad de la competición al estar, como hemos mencionado antes, liderado por antiguos directores de la histórica escudería italiana.

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