Ferrari vuelve a convertirse en el objetivo de todas las críticas tras protagonizar un lamentable incidente, que provocó el abandono de sus pilotos en el Gran Premio de Brasil.

Charles Leclerc tras realizar una gran remontada, rodaba en la sexta posición frenando a Valtteri Bottas cuando el Mercedes dijo adiós tras una humareda blanca, dejando al finlandés fuera de la carrera, provocando así la primer safety car del Gran Premio. Aprovechando esta situación el monegasco entró a boxes para poner el neumático blando, quedándose en la quinta posición justamente por detrás de su compañero de equipo Sebastian Vettel.

Sirviéndose del relanzamiento de la carrera Charles Leclerc consiguió ganarle la posición a su compañero de equipo, no obstante Sebastian Vettel no quedó satisfecho ante esta situación y en la vuelta número sesenta y cinco trato de devolverle la jugado, sin embargo cuando el alemán trataba de sobrepasar al monegasco, movió ligeramente su monoplaza hacía la izquierda, donde se encontraba Charles Leclerc, provocando así un choque que acabó por saldarse con el abandono de ambos pilotos.

The moment the race turned on its head 🤯#BrazilGP 🇧🇷 #F1 pic.twitter.com/Y77NrJMJ0g

— Formula 1 (@F1) November 17, 2019

Nadie podrá negar que este incidente no veía venir, ya que esta temporada los Ferrari han confeccionado una innumerable lista de situaciones tensas en pista.

Mal Sebastian Vettel, mal Charles Leclerc, pero sobre todo mal Ferrari; por no haber sabido gestionar la situación. Por no haber establecido unos límites a sus pilotos, por dejarlos saltarse las reglas y los acuerdos sin consecuencia alguna. Lo cual finalmente ha abocado en el hundimiento de la escudería italiana, que debe aprender a gestionar el talento de dos grandes pilotos bajo el mismo techo o en caso de no lograrlo prescindir de uno de ellos.

Mientras Sebastian Vettel volvió a demostrar su clarísima frustración ante el talento de su nuevo compañero. El alemán se ha comportada de una manera irresponsable, pueril e innecesaria; algo totalmente indigno de sus cuatro títulos mundiales. Sebastian Vettel podía haber adelantado a su compañero sin ese movimiento, ya que tenía espacio de sobra para ganar la posición y en caso de no ver claro el adelantamiento no haberlo ejecutado. El alemán pareció olvidar el respeto que debe guardarle a su compañero de pista y las consecuencias que este gesto ha tenido para su equipo.

Un equipo donde todos y cada uno de sus miembros trabajan duramente para que esos dos monoplazas de los mejor de sí mismos en cada carrera, un trabajo que ayer Sebastian Vettel  tiro por tierra con ese estúpido movimiento hacía su compañero.

Un equipo que ayer perdió la tercera posición en el campeonato mundial de pilotos en favor del vencedor de la carrera Max Verstappen. Algo por lo que sus dos pilotos deberán disculparse largo y tendido, porque estas actuaciones en pista no pueden ser permitidas; y si Ferrari no consigue encauzar la competitividad de sus pilotos esta situación volverá a repetirse una y otra vez, por lo que en beneficio de sus pilotos, el equipo y todos aquellos que han aplaudido cada triunfo de la escudería italiana esperemos que este doble cero les lleve a tomar las medidas de corrección pertinentes.

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