El finlandés, a pesar de haber mostrado una gran mejora de rendimiento con respecto a 2018, no ha podido evitar otro título mundial de su compañero de equipo.

Y otro año más, otra temporada que Mercedes domina sobre sus rivales. A falta de dos carreras para que acabe el año, la escudería de Brackley ya tiene ambos Campeonatos matemáticamente conseguidos.

Lewis Hamilton se llevó este pasado fin de semana en Austin, Estados Unidos, su sexto Campeonato Mundial de Pilotos de Formula Uno. Su compañero, Valtteri Bottas, que se marcó un fin de semana de 10, no ha podido hacerle frente durante la temporada.

El finés comenzaba la temporada ganando en Australia y mostrando un ritmo y mentalidad muy diferentes a 2017 y 2018, donde fue aplastado por el piloto británico. Durante las seis primeras carreras estuvo en el podio, consiguiendo dos victorias, la de Australia y también en Azerbaiyán, donde el año pasado un pinchazo en la última vuelta arruinó su más que cantada victoria.

Cuando Valtteri no ganaba, era segundo, y ese ha sido su problema, demasiadas veces por detrás de Hamilton, que, carrera a carrera y victoria a victoria, iba alejándose más y más de su compañero. Mientras que el de Nastola lleva, con la de Austin, 4 victorias y 15 podios, Lewis cosecha un total de 10 victorias y 16 podios.

Aún así y con todo el pescado ya vendido a falta de las carreras de Brasil y Abu Dabi, Bottas se siente optimista y mira a 2020 con ganas de más.

"Sé que puedo batir a Hamilton y mi victoria en Austin es una prueba de ello. Me da mucha confianza porque he conseguido darle la vuelta a muchas carreras y condiciones que eran complicadas para mí. He dado realmente buenos pasos hacia delante este año, así que estoy deseando que llegue el próximo", comentaba hacia Sky Sports al acabar la carrera de Estados Unidos este pasado fin de semana.

Además, Valtteri hace autocrítica, afirmando que son las curvas lentas donde más pierde, justo donde Hamilton va mejor.

"En general, diría que tengo una debilidad en las curvas de baja velocidad, en el estilo de pilotaje. El punto fuerte de Lewis está ahí, pero me estoy acercando mucho y haciéndolo mejor. Este año diría que he cometido menos errores, he sido más consistente. Estoy mejorando. Seguiré trabajando duro. Llegará", afirmaba.

Incluso el mismo Nico Rosberg, único piloto que ha sido capaz de arrebatar a Lewis Hamilton un título (allá por 2016) y que se retiró tres días después de conseguirlo, siendo sustituido por Bottas, cree que el finlandés, a pesar de mejorar mucho y tener buenos sábados, el ritmo en carrera es su talón de Aquiles.

"Valtteri siempre tiene momentos en los que es realmente fuerte y vence a Lewis, pero Lewis siempre regresa y le destruye. El ritmo de carrera creo que ha sido un problema clave de Valtteri. Debe mejorar ahí: desgasta los neumáticos traseros mucho más que Lewis en la mayoría de las carreras, así que ese es realmente un gran problema para él", opinaba el alemán.

Con la temporada ya decidida y sin apenas nada en juego, está claro que Valtteri Bottas peleará por ganar las dos últimas carreras del calendario para irse a navidad con la cabeza bien alta, pues tendrá que trabajar aún más para ganar a Hamilton, pues visto lo ocurrido este año con Ferrari y Red Bull, si las cosas no cambian el año que viene, parece ser el único candidato para quitarle el trono a Hamilton.