Max Verstappen ha tenido un excelente viernes en Sochi. 
Después de una segunda posición en la práctica matinal, Max logró marcar el tiempo más rápido durante el segudo libre por delante del hombre del momento, Charles Leclerc. 
El holandés de Red Bull, quién realizó 29 vueltas por la tarde, marcó un mejor tiempo de 1: 33.162

Verstappen, al igual que los pilotos de Toro Rosso, tendrá una peñalización de cinco posiciones en la parrilla de salida del Gran Premio de Rusia que se disputa este fin de semana en Sochi, al estrenar una nueva especificación de su unidad de potencia de Honda, en vistas de dar una gran sorpresa en la próxima cita, el Gran Premio de casa para el motorista nipón, Suzuka.

"Ha sido un día muy positivo, en el que el coche ha mostrado un buen rendimiento con todos los compuestos. Hemos seguido nuestro programa al pie de la letra y ha quedado claro que somos muy rápidos tanto en el primer como en el tercer sector. Cuando todo va bien en el coche tienes el presentimiento que todo va a ir bien durante el resto del fin de semana, espero que así sea, ya que en Singapur no quedamos del todo contentos".

Pese a la sanción que pesa sobre él para la salida del domingo, se desprende un halo de optimismo en las palabras del holandés, sabedor de que las condiciones meteorológicas pueden jugar en su favor y dar así la campanada cuando sus rivales menos lo esperan.

"Tiene pinta de que va a llover mañana, por lo que esperamos que el coche también vaya bien sobre mojado. Necesitamos clasificar lo más arriba posible, ya que tener una penalización de cinco puestos. Aquí se puede adelantar, por lo que salir octavo tampoco sería un desastre. Todavía es viernes, es demasiado pronto para hacer cualquier tipo de predicciones, pero ha sido un inicio muy prometedor".

Es pronto para decir en qué posición puede acabar el Red Bull de Verstappen hasta que sus rivales pongan sus cartas sobre la mesa, pero de seguro que el holandés puede ofrecernos, una vez más, un gran espectáculo.