La fiabilidad del motor Renault deja fuera de juego a McLaren
McLaren obtuvo el peor resultado de la temporada en el Gran Premio de Bélgica, tras el desvanecimiento de los motores de sus dos monoplazas. Las unidades de potencia de Renault no están funcionando tan bien como se esperaban y McLaren está pagando las consecuencias.
McLaren cerró el fin de semana en Spa-Francorchamps como el peor de toda la temporada. Ninguno de sus dos monoplazas logró cruzar la línea de meta bajo la bandera a cuadros. Una imagen que más bien recuerda a los nefastos años de la unión McLaren-Honda, puesto que los de Woking no obtenían un resultado tan desastroso desde el Gran Premio de Italia de 2017.
Sin embargo, en esta ocasión el equipo al igual que sus pilotos quedan libres de toda culpa, ya que lo que acabó arruinando el fin de semana de McLaren fue el fallo de la unidad de potencia de sus dos monoplazas.
El Gran Premio de Bélgica no comenzó nada bien para McLaren, el equipo británico vio como perdía el liderato de la zona media de la parrilla durante los entrenamientos libres. La sesión de clasificación no fue mucho mejor, ya que el bajo rendimiento de Renault se alineó con la mala suerte. Carlos Sainz no puedo ni siquiera completar su vuelta de clasificación debido a la bandera roja provocada por el monoplaza de Antonio Giovinazzi; y todo eso sin contar con los cinco puestos de penalización que acumulaba el español tras estrenar la nueva especificación del motor Renault. La cual no fue usada en carrera bajo el pretexto de reservarla para el Gran Premio de Monza. No obstante las opiniones del español sobre la última actualización del motor Renault no fueron nada alentadoras.
Asimismo su compañero de equipo no conseguía un gran resultado debido a la falta de ritmo de la unidad de potencia de Renualt, por lo que solo pudo ser duodécimo; aunque debido a las penalizaciones de sus compañeros el domingo ganó una posición en la parrilla de salida.
Asimismo si la jornada del sábado fue dura para McLaren, la del domingo no comenzó de mejor modo. Durante la vuelta de formación el monoplaza de Carlos Sainz empezó a sufrir una pérdida de potencia, para después quedarse clavado en la salida. A pesar de que el español logró arrancar su monoplaza, este no lograba alcanzar el ritmo de carrera y finalmente se vio obligado a abandonar en la vuelta número dos del Gran Premio.
No obstante más doloroso fue el abandono de Lando Norris, el cual tras el accidentado comienzo de la carrera consiguió hacerse con la quinta posición. Manteniéndola durante casi toda la carrera, gracias a que de manera sorprendente y por primera vez en todo el fin de semana el motor Renault parecía estar rindiendo al ritmo que se esperaba. Sin embargo cuando apenas faltaba una vuelta para que finalizará la carrera; su unidad de potencia, que aun contaba con vida útil, dijo adiós. Dejando a Lando Norris con la miel en los labios, aunque hay que decir que su actuación le valió para ser elegido el piloto del día.
La fiabilidad dejo totalmente fuera de juego a McLaren en un fin de semana donde tenía la oportunidad de conseguir un valioso número de puntos, siendo Renault la responsable de estos problemas. De la cual se esperaba una mayor fiabilidad en el sexto año de la era híbrida y sobre todo un poquito más de velocidad. Quizás Red Bull no andaba tan errado al buscar una alternativa a los motores de Renault. Por lo que McLaren que tiene contrato con Renault hasta 2020, no deberá dudar en buscar otras alternativas si los franceses no consiguen aportarles una mejoría notable, aunque bien sí bien esto es bastante difícil de lograr, Renault tiene la experiencia y los medios necesarios para conseguirlo.
