La batalla interna dentro del equipo McLaren ha sido otro de los puntos fuertes dentro de la recuperación que vive el equipo de Woking en 2019, pues la calidad y la juventud de sus pilotos ha coincidido con las mejoras del MCL34 y el equipo se muestra sólido en el cuarto lugar del mundial de constructores. Carlos Sainz y Lando Norris llevaron frescura a una escudería que la necesitaba con urgencia. Asimismo, más allá de la buena relación que parecen tener ambos pilotos, la constante dentro del paddock siempre será la comparación de un piloto ante su coequipero y sus actuaciones en el mismo medio mecánico.

En 2019, está claro que el mejor piloto de la parrilla fuera de los cinco pilotos de punta ha sido Sainz, con el permiso de Kimi Raikkonen. La consistencia y el oportunismo del español estuvieron a un nivel muy alto en la primera mitad de 2019 —más allá de la ocasión de podio perdida en Hockenheim—. Por su parte, Norris ha rendido de gran manera durante la clasificación —su récord de 8-4 sobre Sainz así lo indica—, pero ha demostrado cierto grado de dificultad para mantener un rito de carrera sobresaliente —pierde 9-3 ante el español en los días de GP—, aunque su cantidad de puntos no es la que mereció, pues tuvo problemas mecánicos y en pits que le quitaron buenos puntos en Francia y Hungría, por ejemplo.

Alan Jones y otra muestra de la exageración que siempre rodeó a la Fórmula 1

Sainz ha superado, hasta aquí, con comodidad a Norris gracias a su gran ritmo de carrera —que le permitió cerrar la primera mitad del año con dos P5 consecutivos—. Asimismo, para la "mala" fortuna de Norris, se debe destacar que su año de estreno en la F1 coincidió con el mejor año de la carrera del español, quien en las primeras 12 carreras del año ya estableció una nueva marca personal de puntos en su trayectoria en la máxima categoría.

Por otro lado, más allá de las estadísticas —que por ahora favorecen a Sainz—, el claro ganador de esta batalla amistosa dentro del garaje es McLaren. La legendaria escudería —con ocho campeonatos de constructores y 12 de pilotos en su haber— está teniendo su mejor año desde 2014, año de su última aparición en el podio y el último de su unión con los motores Mercedes. El equipo sumó 82 unidades en la primera mitad de la campaña, superando el total de cada una de sus últimas cuatro temporadas.

En cuanto a las carreras finalizadas dentro del top 10, Sainz lo hizo en ocho ocasiones, mientras que Norris sumó unidades en cinco Grandes Premios. En conjunto, los 13 resultados dentro del top 10 en 2019 ya igualaron el número de McLaren del año pasado.

Difícilmente se puede pensar que la línea ascendente de McLaren en la actualidad va a detenerse cuando se reanude la temporada en Spa-Francorchamps con el Gran Premio de Bélgica. Asimismo, será interesante observar el crecimiento de Norris y observar si Sainz puede superar el nivel alto que ya mostró en la primera mitad.

La dinámica de dos jóvenes con tanto talento ha favorecido el crecimiento de una escudería que debe tener como tarea regresar a su puesto de lujo dentro de la parrilla de la Fórmula 1. El 2019 de McLaren ya es un éxito en relación con su actuación en el tiempo reciente y puede auspiciar un 2020 altamente competitivo para la escudería, aunque nada en la vida de las carreras es seguro.