¿Quién le ha echado un mal de ojo a Ferrari?
La suerte le está siendo esquiva al equipo italiano y a sus pilotos. Tras el Gran Premio de Austria, es preocupante la mala suerte que han tenido siempre que han podido luchar por una victoria.
Tres han sido las ocasiones en las que parecían imbatibles. Hasta en tres Grandes Premios, los de rojo se veían ganadores holgadamente. Y tres han sido las veces en las que han quedado relegados del cajón más alto del podio. Este fin de semana le tocó a Charles Leclerc, terminando segundo tras ser adelantado por Max Verstappen, el vencedor.
Charles Leclerc dominó casi con totalidad el pasado Gran Premio de Austria en el Red Bull Ring. Consiguió su segunda pole del año y, a diferencia de lo ocurrido en Bahrein, lo hizo todo bien desde la salida, manteniendo el liderato y abriendo un hueco con el grupo perseguidor. Esa ventaja que en principio tuvo, luego le fue totalmente en contra.
Y es que, a diferencia de Max Verstappen y los Mercedes que lo hicieron con el medio (amarillo), Leclerc había hecho su tiempo de Q2 con el neumático blando (rojo). Esto posibilitaría en las primeras vueltas obtener ventaja frente a los rivales, pero en cuanto a la estrategia fallaría. El piloto de Ferrari paró en la vuelta 22 a poner un set de neumáticos duros (blanco) USADOS, ya que solo habían llevado 1 para todo el fin de semana, mientras que Max Verstappen paró 10 vueltas más tarde y calzó un set de duros nuevos. La diferencia fue clave para la victoria.
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Con eso, la estrategia del sábado les costó la carrera el domingo. Y van tres domingos en los que los italianos han perdido la carrera, aunque esta vez contra Red Bull.
Bahrein parecía que sería el GP redondo para Charles Leclerc, y un problema mecánico acabó con las esperanzas de su primera victoria. En Canadá, la más que debatida reincorporación a pista de Sebastian Vettel por delante de Hamilton supuso una sanción que lo bajó del cajón más alto tras liderar todas y cada una de las vueltas de la prueba. Y ahora, en Austria, esta estrategia “agresiva” para el inicio de carrera los condenó una vez más.
El cúmulo de infortunios de este año no solo viene por parte de las estrategias o del equipo, ya que, todo sea dicho, los pilotos no están yendo todo lo fino que podrían.
En el caso del monegasco, su ambición de novato pudo con él en Bakú, en la clasificación del GP de Azerbaiyán donde, tras haber marcado un tiempo bueno para avanzar a la Q3, estrelló su Ferrari en la zona del castillo azerí privándose de luchar por la pole y comprometiéndole la carrera. Por parte de Seb, las actuaciones en las clasificaciones de Mónaco (quedándose a 8 décimas de Hamilton y por detrás de Verstappen) o Francia (calificando séptimo detrás de los Mclaren y sin mejorar su tiempo en Q2) perjudicaron luego su carrera.
Es triste ver que nunca pueden acabar de rematar el trabajo, viendo como de fuertes se mostraron en pretemporada. Aunque sea por asuntos distintos, ya es la tercera carrera que se les escapa a los de Maranello. Cualquiera diría que les han echado un mal de ojo y que, cada vez más avanzada la temporada, parecen no poder levantar cabeza...