El mercado de pilotos de Motogp se empieza a mover. Esta semana hemos conocido la renovación de Pecco Bagnaia con Ducati hasta el año 2024 y no será el único movimiento que se produzca esta temporada, aunque las motos que presentan las fábricas dejan pocas opciones a los pilotos. 

En primer lugar, los dos campeones del mundo de los dos últimos años Quartararo y Mir podrían necesitar un cambio de aires. Por su parte Joan Mir lleva tres años en un proyecto con Suzuki que parece estancarse temporada tras temporada. El balear consiguió el mundial del año 2020 gracias a su regularidad y desde su posición de campeón reclama una marca que esté a su altura. 

Por su parte, Suzuki trata de minimizar las diferencias con el resto de competidores, pero lo único que ha conseguido es mantenerse a rebufo en cuanto a innovación. Una postura que Joan Mir ha acusado durante toda la temporada pasada y parece que este año será el momento de resarcirse y buscar nuevas opciones en el mercado actual. Pero, ¿cuáles son esas opciones? 

Si Joan Mir decide abandonar Suzuki, Yamaha podría ser la opción, o la única opción disponible para él. La fábrica de los diapasones cuenta con Quartararo y Morbidelli en el equipo oficial, y con Andrea Dovizioso y Darryn Binder en el satélite. Por lo que podría estar buscando otro piloto ganador, pero para ello tendrían que prescindir del reciente ascendido Franco Morbidelli. 

En Honda se encuentran en una situación parecida a la de Yamaha, aunque parece que los test de pretemporada han sido satisfactorios para los pilotos oficiales. El asiento de Pol Espargaró sería la única opción en el equipo oficial, aunque los boxes de Nakagami y Álex Márquez podrían quedarse vacíos. Todo dependerá de los resultados que consigan y no será hasta mitad de temporada en la que se realicen los cambios. 

Por lo tanto, por el momento, Joan Mir no tiene opciones claras hacia las que cambiarse. Al vigente campeón, Fabio Quartararo, le ocurre lo mismo. El piloto francés se ha mostrado muy descontento con su equipo durante la pretemporada y admite que esperaba una moto más competitiva. 

El problema principal de Yamaha es la falta de potencia y la gran diferencia de kilómetros por hora, que continúa aumentando en lugar de reducirse con sus competidores. Pero, el suave estilo de pilotaje de Quartararo se adaptaría peor a una Honda y por lo tanto, tendría mayores complicaciones para cambiar de equipo, si así lo decidiese. 

Por ahora no hay ningún tipo de confirmación, aunque durante los meses de invierno algunos medios informaron sobre un pequeño acercamiento entre el piloto francés y el equipo del ala dorada. 

Por su parte, las Ducati están blindadas y el único cambio que podría suceder es el cambio de Jorge Martín por Jack Miller, aunque el australiano podría anteponerse al cambio  de regresar al equipo satélite. Pero Jorge Martín ya ha pisado fuerte en 2021 y busca ver recompensado su esfuerzo con una moto de fábrica. 

La única marca que se mantendría sin cambios y sin pretendientes es Aprilia que en las próximas temporadas espera desarrollar una moto ganadora. 

Por lo tanto, el problema principal del mercado de pilotos es la falta de motos ante el aumento de pilotos jóvenes y talentosos. Aunque muchos acaban contrato este año, la falta de opciones hace complicado los cambios por lo que puede ocurrir que a final del 2022 la parrilla de la temporada 2023 sea muy similar a la de este año. 

Y otra gran incógnita que se pondría sobre la mesa sería la llegada de nuevos rookies, sobre todo de un nombre en concreto: Pedro Acosta. Si el piloto murciano llega a Motogp, KTM tendría serios problemas para mantener a la juventud de su box. 

Todos estos cambios se confirmarán a medida que avance la temporada y los pilotos tengan la posibilidad de demostrar su talento y luchen por su permanencia. 

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