El piloto italiano Andrea Dovizioso (34) ya ha disputado su primera carrera alejado de MotoGP, y lo ha hecho el pasado fin de semana en el circuito italiano Rivarolo Mantovano, donde consiguió cosechar un sexto y quinto puesto, en el campeonato italiano de motocross, UISP. Además ha expresado a la revista italiana 'La Repubblica' su propósito para este año: "Mi primer objetivo no son los resultados. Quiero disfrutar plenamente de esta pasión, aprovechar todo lo que me da. Respirar”. Aunque también ha asegurado sus ganas de volver a pilotar una MotoGP para 2022, ya que se ve con fuerzas y posibilidades de conseguir el que sería su primer título mundial en la categría reina. 

También ha aprovechado la entrevista para dejar claro el porqué de su marcha de Ducati, tras ocho años juntos en la parrilla: "Todavía podría haber luchado por el campeonato. Pero en Ducati todo se había vuelto demasiado pesado, necesitaba tranquilidad. Tengo suerte, no necesito dinero, hay cosas más importantes en la vida”, y haber conseguido formar una familia dentro del box, salvo con el director general de Ducati Corse, Luigi Dall’Igna, con el que ha reconocido, su relación se ha ido enfriando: “En MotoGP todo está muy bien, pero sólo se disfruta si llegan los resultados. En 2020 no llegaron. No podía vivir con serenidad: en Ducati tenía buenas relaciones con todo el mundo, excepto con una persona”.

De la misma forma, también ha verbalizado su malestar dentro del equipo en las últimas temporadas, que se ha visto reflejado en los resultados, a pesar de conseguir ser subcampeón tres temporadas consecutivas en 2017, 2018 y 2019, y ha aceptado que el equipo italiano no ha prestado atención a sus opiniones: “El límite de la moto ha sido siempre el mismo, durante años. He querido dar mi opinión, pero nunca se me ha escuchado”.