A debate, el motor de Yamaha: satélite VS oficial
Semana de análisis. Tras el GP de Jerez los equipos del mundial de MotoGP no pueden dormirse en los laureles. Es el caso de Yamaha y que, según los resultados tanto del día de la carrera como el del test del lunes, parece que ven la luz al final del túnel.
En primer lugar, el fin de semana tuvo un claro protagonista y no fue el ganador de la carrera -Márquez- sino Fabio Quartararo. El piloto de Yamaha consiguió la pole y demostró con el ritmo que marcó en la carrera que va a dar mucha guerra en lo que queda de temporada. Durante la mayor parte de la cita andaluza, el francés se posicionó por detrás del siete veces campeón del mundo. Por detrás suya, su compañero de equipo Franco Morbidelli.
Los dos del equipo Petronas sacaron su máximo potencial y su carácter más competitivo prácticamente en toda la carrera. Aparentemente las Yamaha funcionaron correctamente, por lo menos las motos de los alumnos de la ‘VR46 Academy’. Sin embargo, no es el caso de la M1 de Valentino Rossi. Cuando se apagó el semáforo, el de Tavulia se quedó atrás y no consiguió acercarse al grupo cabecero compuesto por Márquez, Quartararo, Morbidelli y Dovizioso. Aunque, en el segundo sector de la carrera, Rossi escaló posiciones hasta colocarse en la sexta posición, la que se sería su posición definitiva. “He sido rápido en la segunda mitad de la carrera”, declaró el de Yamaha a Natacha Alfageme -periodista de DAZN-. Pero, confirmó que no fue especialmente rápido el fin de semana. Respecto al test que realizarían el lunes, Rossi dijo que tenían piezas para probar y que el objetivo era encontrar algo bueno que les ayudara a ser más competitivos.
Para su compañero de equipo, Maverick Viñales el domingo le salió casi redondo. “Este resultado me sabe a victoria”. Y es que, tras el desastroso comienzo de temporada le llegó el momento más esperado: brindar con champán en el podio. De hecho, es el primer podio en Jerez desde que está en la categoría más pesada y es su primer podio de la temporada. Si pudo conseguir la tercera posición fue -entre otras- por el momento de la salida. Se sabe que no es su punto fuerte pero el de Yamaha dijo: “Por fin hemos salido bien”, y asegura que ha cambiado su procedimiento de salida y que ha encontrado el equilibrio. Un equilibrio que a rasgos generales, le cuesta encontrarlo a Yamaha. Maverick es de los pilotos más sinceros de la parrilla y no se corta un pelo para decir los problemas que le ocurren al equipo: “Nos falta mucha tracción a pesar de que frena y gira bien, pero nos falta aceleración”, y añadió que lo que hace falta es hacer más dócil el motor.
Por otra parte, se encuentra “El Diablo”, Fabio Quartararo, que ha revolucionado todo el paddock con su talento. Un problema en el cambio de marchas le obligó a abandonar su mejor momento profesional mientras estaba por detrás de Márquez. Ante esta situación, el joven de 20 años dijo a la prensa que colocarse detrás de Márquez en la carrera le ha servido más que toda la experiencia de las tres carreras anteriores. “Ver al campeón delante me da mucha confianza”, concluyó el de Petronas.
A comparación de la pasada temporada, el equipo Yamaha ha progresado a nivel mecánico, y es que no cabe duda en que los miembros del box del equipo japonés trabajan día y noche para resolver los problemas relacionados con la aceleración y falta de ‘grip’ En el test del lunes, Quartararo lideró el entrenamiento marcando un tiempo de 1:36:379, medio segundo más rápido que la pole del sábado. Su compañero -Morbidelli- finalizó en séptimo lugar. Viñales por detrás suya y Rossi en la plaza 16.
El próximo fin de semana Yamaha volverá a salir a la pista para comerse el mundo, ya que dispone del mejor arsenal de combate: cuatro pilotos cuyo objetivo es ser más rápido que el resto.