Reporte de la carrera del Gran Premio de México
Lo vivido en el Autódromo Hermanos Rodríguez este histórico día
Hoy esperé en la entrada del paddock para captar la llegada de los principales protagonistas de esta cita.
Gene Haas llego a la vanguardia de su equipo, para inmediatamente tomar un té en la entrada de la hospitalidad. La marea de mecánicos e ingenieros de Ferrari llegaron después de Binoto, a quien todo el fin de semana le vi una sonrisa.
Chase Carey hizo varias escalas al llegar, primero en Sauber con Vasseur, después con Steiner. En ese momento llegó Max junto con Marko y Horner, este último, aprovecho la concentración de fanáticos que rodearon al holandés para acercarse a Carey a charlar mientras caminaban.
La calma se mantenía a espera del inicio de las actividades en pista.
Muchos asistentes se abarrotaban esperando poder tomarse fotos con los pilotos más famosos, algunos lograron hacerlo con Max, Ricciardo, Checo, incluso con Sebastian, más el reto era poder alcanzar al veloz monopatín en el que se movía Lewis.
La carrera la seguí desde la sala de prensa; había muchas pantallas a nuestra disposición, entre las cuales se contaba una portátil que disponía de las radio comunicaciones entre los equipos y los pilotos en vivo. Cuando llegó el abandono de Checo Pérez, tuve que dejar la sala para buscar alguna declaración del mexicano, así que la mencionada pantalla portátil se convirtió en una muy útil herramienta para estar informado.
A veces olvidamos que los periodistas que nos nutren de información tienen su parte de aficionados; fue muy alentador ver que las emociones inundaban la sala ante el abandono de Ricciardo, los problemas de degradación de Hamilton o el gran ritmo final de Vettel.
En la conferencia de prensa, Verstappen se veía tranquilo, con satisfacción de haber logrado su objetivo. Vettel, cabizbajo, reflejaba su derrota pero más con decepción que con tristeza.
Hamilton, por su parte, irradiaba emoción. Era muy expresivo y por momentos parecía al borde de las lágrimas. Compartió buen aparte de su tiempo respondiendo una gran cantidad de preguntas de todos los medios escritos, hasta que un miembro del equipo Mercedes le pidió ir a la celebración al garaje.
La marea de cámaras estaba lista a su llegada, disparando infinidad de veces para captar el momento. Al ser levantado en hombros, la multitud de camarógrafos se aproximó para tener la toma más cercana posible. Lewis tomó un poco de su tiempo para acercarse a saludar a los fanáticos que lo esperaban en la recta.
El día noticioso casi terminaba, solo una pequeña parada en Racing Point para una pequeña sesión con Otmar Szafnauer, quien tuvo un muy difícil día pero nos concedió unos minutos.
Poco a poco la sala de prensa se ha ido quedando sola. Este día varios periodistas se han quedado a cerrar sus ediciones, más los pocos restantes, seguimos repitiendo.
Espero que el Gran Premio de México haya cumplido las expectativas. Una carrera interesante con muchas cosas para analizar, pero sobre todo, un evento de alto nivel. Muy bien organizado y con gran asistencia. Que siga mejorando.