Compleja clasificación para Max Verstappen que no pudo más que quedarse en la tercera posición detrás de los dos autos Mercedes Benz para el Gran Premio de Portugal. Los pequeños despistes costaron mucho en la última parte del día ya que tuvo un par de vueltas borradas por exceder los límites de pista.

“Empecé desconectado en clasificación, realmente lento. No tuve balance en el auto... Básicamente estuve comprometiendo una cosa y después perdí un poco de desempeño en otra cosa. Solo no fue lindo”.

Por la mañana Verstappen se quedaba al fin con el mejor tiempo de una sesión al superar a Hamilton  por más de doscientas milésimas, pero esta ventaja desapareció al llegar la primera eliminación de la clasificación donde se quejó en la radio por la poca velocidad en recta, terminando cuarto detrás de Norris y Lewis.

En la Q2 al montar los medios la situación no mejoraba, con un margen de más de medio segundo contra el Mercedes número 44 que lideraba en las Pirelli amarillas.

Con la cámara a bordo en su primer intento de la fase final, se observó que salía más allá del bordillo en la curva cuatro por lo que después de macar el tiempo más rápido este le fue borrado por dirección de carrera. Inmediatamente después dio una segunda vuelta con ese mismo juego de neumáticos para ser tercero que fue su posición final ya que no pudo mejorar por el tráfico en pista.

“Esa primera vuelta en Q3 era decente pero tuve un gran momento en (la curva) cuatro, así que me fui un poco afuera de pista”.

Desde el año pasado se reasfaltó el circuito y las quejas fueron contra el material utilizado pues sin importar las características del trazado, los autos carecían de las prestaciones que les permitieran sacar el desempeño de los monoplazas. Meses después, las sensaciones continuaron por el mismo tono como explicó Max: “Esto solo mostró que fue una difícil sesión para tener alguna clase de agarre en el, porque esa curva (la cuatro) es plana y súbitamente de la nada, el auto solo se arrebató y fui un poco ancho”.

Nuevamente la condición más importante fue el estado óptimo de las cubiertas, que estuvieran en la adecuada temperatura para sortear el deslizamiento sobre el asfalto de Portimao. Muchos pilotos esperaron que la goma en pista ayudara a mejorar el comportamiento de los autos pero eso solo hizo que se estorbaran entre sí.

“Estaba confiado de que podía hacer otra buena vuelta... después en el último sector, perdí todo mi tiempo de vuelta con un Aston Martin en frente y después tomando todo el rebufo en la línea”, relataba Verstappen. “Especialmente con el poco agarre que ya teníamos y el fuerte viento allá afuera, básicamente me costó mucho tiempo”.

Con los Red Bull y Mercedes partiendo la carrera en la gama media, se espera que sea determinante lo que suceda en la primera vuelta, los ritmos de tanda larga parecían similares entre ambos equipos pero hoy solo quedan dudas en el holandés.

“Trataremos de pelear mañana en carrera y ver que podemos hacer.

“Ojalá todo se estabilice un poco más porque hasta ahora no ha sido muy divertido de manejar aquí”.