Toyota había logrado su tercer doblete consecutivo en lo que iba de Súper Temporada 2018/19 del WEC, con el #8 de Fernando Alonso, Sebastien Buemi y Kazuki Nakajima ganando las 6 Horas de Silverstone y el #7 de José María López, Kamui Kobayashi y Mike Conway en el segundo puesto.

Sin embargo, ambas unidades TS050 Hybrid no lograron pasar la revisión técnica post carrera. Los delegados técnicos encontraron que no cumplían con el test de flexión del bloque de deslizamiento delantero.

El boletín de la FIA manifestaba que el coche #7 “la parte delantera del bloque de deslizamiento se ha desviado unos 9 mm bajo la carga específica de 2500 N en ambos lados del bloque”. Mientras que en el #8, “desvió 6 mm en el lado derecho y 8 mm en el lado izquierdo bajo la carga específica de 200 N en la parte delantera del bloque”.

Según el artículo 3.5.6 del reglamento técnico de los LMP1 Híbridos, la parte delantera del bloque de deslizamiento no debe superar los 5 mm de desviación cuando se le aplica una carga de 2500 N de manera vertical.

“Si bien no hay reportes de que el coche estuviera involucrado en algún incidente específico, el competidor indicó que la única explicación a esta inconformidad pudo haber sido como resultado de que el coche girara por fuera de la pista y sufrieran algún tipo de daño las varillas internas que arreglaban esa porción de auto. Los comisarios consideraron esta posibilidad, pero determinaron que el diseño del coche debe ser capaz de soportar el rigor normal de una carrera de 6 Horas”.

De esta manera, el Rebellion #3 de Thomas Laurent, Gustavo Menezes y Mathias Beche logran la primera victoria para un No Híbrido. #1 de Neel Jani y André Lotterer completan el doblete del equipo suizo. El SMP Racing #17 de Stéphane Sarrazin y Egor Orudzhev quedan terceros.

Se espera que Toyota de un comunicado con la apelación a la decisión tomada por los comisarios.