Una visita a la Super Copa mexicana

Siguiendo la exploración de categorías en México, MotorLat estuvo presente en el asfalto potosino.

09 Oct, 19

( palabras)

Una visita a la Super Copa mexicana — **Fuente imagen:** FdoAlonso

Hace menos de un mes conversamos con Michel Jourdain Lascurain (piloto mexicano que tuvo actividad internacional en la Indy Racing League (IRL), la CART/ChampCar, WTCC y Nascar), y recordamos sus participaciones en Indy500, además nos dio su opinión sobre la actualidad del deporte motor en México y nos extendió una invitación para acudir a la sexta fecha de la Súper Copa 2019, que se realizó en el Tangamanga Track, de San Luis Potosí.

La Super Copa es una categoría que ha existido por varios años y que busca evolucionar para ofrecer oportunidades de crecimiento para los pilotos, con cuatro campeonatos que se disputan en el mismo evento: MexBike, Fórmula 1800, Súper Turismo y Tractocamiones.

Este año se introdujo un nuevo auto con la base de un clase A de la marca Mercedes Benz. El chasis es un diseño de la empresa norteamericana Howe, que acopla un motor de Prefix Co. (V8 6.2 Lts de 460 HP) y una transmisión Holinger con cambios secuenciales. El auto más moderno en competencia nacional -que se ensambla en Toluca, Estado de México-, es similar a los deportivos que corren en Bélgica, Australia y Estados Unidos.

Por su parte, los tractocamiones son un diseño corto de Freightliner que están propulsados por un motor de 8.2 litros V8 con 480 HP, este modelo tiene unos cinco años en competencia.

El circuito potosino está ubicado dentro de las instalaciones del Parque Tangamanga 2, el trazado que antiguamente era conocido como San Luis 400, fue realizado en una antigua pista de despegue de avionetas. Tiene 2.3 kilómetros de largo, de los cuales, el primer sector es una zona trabada que desemboca en un cambio de dirección hacia una horquilla para después salir a una larga recta que cierra en una chicana, finalizando la vuelta con una la glorieta para llegar a la línea de meta.

Las actividades se separaron en dos días: el sábado, con prácticas por la mañana y clasificaciones por la tarde; en tanto que el domingo se realizaron las carreras.

En la serie F1800 y la MexBike los protagonistas fueron los líderes de cada serie. En los monoplazas, el piloto local Enrique Reyna y en las motos PRO1, Nahún Álvarez, fueron los pilotos que se quedaron con la pole. Para el domingo, Reyna lideró la carrera desde el inicio y aunque hubo un par de salidas del auto de seguridad que nulificaron la ventaja que sacaba a sus perseguidores, el potosino se llevó la victoria, con lo que prácticamente se coronó campeón de la categoría. Por su parte, Álvarez tuvo una arrancada terrible que lo mandó hasta el octavo puesto, pero vuelta a vuelta pasó contrincantes y al quinto giro retomó el liderato. La Suzuki número 18 se llevó una clara victoria.

Los Mercedes Benz fueron los últimos en clasificar el sábado, en dos fases, los cinco más rápidos en la primera sesión pasaron a la segunda etapa. Con el sol en el horizonte, el paso por algunas curvas era complicado, pues la luz daba de frente, pero Homero Richards sorprendió quedándose con la pole por menos de 350 milésimas.

En carrera, la lucha fue a tope con Salvador de Alba presionando desde el segundo puesto y con Michel Jourdain avanzando al tercer escalón. Richards cometió un error en la curva tres al trompear y perder posiciones. De Alba se mantuvo con un buen ritmo en la punta sin problemas mientras que el auto número 20, de Homero, se dedicó a recuperar posiciones para terminar en el último escalón del podio detrás de Jourdain.

“Eran las primeras vueltas donde veníamos presionando fuerte a Homero (Richards), sabíamos que teníamos un ritmo muy parecido e íbamos a tener una carrera muy interesante. Un descuido de Homero hizo que me fuera a la primera posición y después fue cuidarla. Teníamos una ventaja considerable, ser inteligentes en toda la carrera y aquí estamos celebrando el primer lugar”, comentaba “El Copetín” de Alba.

En los Tractocamiones, Salvador de Alba hizo la pole, pero la fortuna no estuvo de su lado y después de lograr una pequeña ventaja, su máquina sufrió un rotura del cable de aceleración obligándolo a abandonar en la primera vuelta, por lo que Enrique Baca se volvió el líder, pero lo seguía muy de cerca Michel Jourdain y Homero Richards. El piloto número 20 aprovechó un hueco que le dejó Michel al llegar a la chicana y se coló a la segunda posición. Unas vueltas más tarde, el tracto de Richards salió al inicio de la larga recta en la primera posición para finalizar en la misma al cruzar la bandera a cuadros.

Después de la premiación, Homero nos comentó: “Tenía muy buen ritmo, mi zona de rebase muy bien estudiada, que era el regreso de la salida (de la horquilla opuesta) en la recta donde ocurre el rebase.

“Se voltea la historia y acá me tocó ganar”.

Durante la competencia, en la calle de pits la gente hablaba de una posible rivalidad de la Super Copa con la NASCAR Peak. Las primeras reacciones serían comparación entre ambas series, ya sea por las características, el nivel de tecnología aplicada a los autos, el tiempo en el que fueron renovados el conjunto chasis/motor, los pilotos que en ellas militan o el número de autos inscritos.

La realidad que en este momento pueden coexistir ambas sin quitarse mercado o espectadores una de la otra. En el caso de lo que ocurrió en San Luis Potosí con las dos series es que ofrecen espectáculos diferentes, pues se realizan en trazados muy distintos, además de que plantean competiciones que aún tienen puntos por mejorar.

Antes de buscar enfrentarse en una lucha por definir que categoría es superior a la otra. Ambas deben mejorar los puntos finos que las hagan atraer más espectadores y que haga crecer la cultura del deporte motor en México, además de fortalecer el conocimiento y exigencia del público, porque esto puede contribuir a elevar la calidad de la competición.