A falta de tres carreras para que la temporada 2017-2018 de la Fórmula E concluya, el piloto francés Jean-Éric Vergne de la escudería Techeetah, pareciera estar tranquilo y cómodo en el primer lugar acuñando 162 puntos en 9 ePrix completados, sin embargo hay razones para poner cuidado.

Su más cercano competidor es el británico Sam Bird de Virgin Racing quien suma 122 unidades, y mucho más lejos el sueco Felix Rosenqvist de Mahindra a 86 puntos, pero ambos con chances matemáticas de aún luchar por la punta, estamos claros que son posibilidades complicadas pero todo puede pasar.

El picante comienza el 10 de junio en el ePrix de Zúrich donde todos los pilotos tendrán la oportunidad de luchar en un nuevo trazado de 2.46 kilómetros. Este evento trae una carrera de automovilismo a Suiza luego de 60 años, por lo que será algo especial y la mayoría querrá poner su nombre en los registros y en el podio.

La siguiente y última parada será en la ciudad de Nueva York donde se realizarán dos carreras (14 y 15 de julio), allí el londinense nada más y nada menos consiguió un doblete la zafra pasada, siendo un claro favorito en ese circuito para el remate del Mundial. No podemos descartar al galo y  actual líder quien logró un segundo lugar en Brooklyn el año anterior.

Quizá Rosenqvist es el que la tenga más complicada de los tres volantes para conquistar el título, pero también conoce las calles neoyorkinas y logró un segundo peldaño la temporada pasada. Si hay algo que juega en contra del sueco aparte de la distancia en puntos, es la fiabilidad, ya que no ha terminado carreras en dos ocasiones (sus dos competidores han concluido todas).

Nos queda esperar un par de meses para ver cómo terminan las cosas en una temporada con final prematuro, ya que recordemos lamentablemente no se realizaron los ePrix de Canadá. Vergne, Bird y Rosenqvist son los encargados de darnos un final de lujo.