Lance Stroll: El GP mexicano es probablemente uno de mis favoritos. Amo la ciudad, la comida es genial y la atmosfera es impresionante. El año pasado tuve un gran resultado terminando sexto lo que supuso mi décimo puesto en el mundial. Es un fin de semana divertido con una vibra especial, el año pasado tuve la suerte de celebrar mi cumpleaños ahí. En el estadio no podés escuchar a la tribuna, pero si sentís como vibra el piso con el entusiasmo de los fans. México es un desafío, por la altitud el auto se pone muy nervioso, pero en eso todos están igualdad.

Sergey Sirotkin: México me recuerda a Sochi debido a la altura el auto produce menos downforce y se comporta diferente. Las gomas sufren mucho. Es un desafío para pilotos y equipos. 

Paddy Lowe, Director Técnico: El Autódromo Hermanos Rodríguez es otro desafío para los equipos y los conductores, dada la gran altitud de la Ciudad de México. Esto prueba predominantemente la unidad de potencia, pero también afecta a los sistemas de enfriamiento, así como a los conductores y al equipo de boxes. El aire delgado significa menos oxígeno, por lo que es físicamente más difícil para todos en el suelo. El diseño también tiene algunas características únicas con el espectacular estadio en las curvas 13 y 14, que cobra vida cuando está lleno de fanáticos el día de la carrera. Por segunda vez consecutiva, los equipos tienen otro back-to-back para manejar en el final ocupado de la temporada.