Está claro que la cúpula que dirige la Fórmula 1 quiere añadir toda la emoción posible a la categoría y para ello siempre ayuda el agitar la coctelera. La última iniciativa que ha propuesto Liberty Media es modificar el sistema de clasificación. Un sistema que ya podrá denominarse clásico e histórico: “el de la Q1, Q2 y Q3”. Salvo modificaciones en las duraciones de cada sesión, este sistema de tres rondas por eliminaciones ha sido uno de los signos identificadores de esta categoría, exceptuando algún que otro experimento fallido que únicamente duró un par de carreras ya hace un par de años. La propuesta es añadir una cuarta ronda clasificatoria, una Q4, donde participen los 8 mejores clasificados de la ronda previa que serán los que se jueguen la pole, recortando evidentemente la duración de cada sesión.  Así, cada piloto tendrá menos tiempo para hacer su vuelta buena y se reducen los intentos para conseguir la misma, algo que puede añadirle algo de emoción y aleatoriedad a la clasificación y a la parrilla del domingo.

Actualmente y como se mencionó de forma previa, la sesión de clasificación en Fórmula 1 está compuesta de tres rondas: una Q1 de 18 minutos de duración en donde quedan apeados los seis peores tiempos, una Q2 de 15 minutos donde el mismo número de monoplazas son eliminados y finalmente los diez mejores coches definirán sus posiciones y la pole en una definitiva Q3 de 12 minutos de duración. Sistema más que clásico pero que permite a todos los monoplazas a realizar mínimo dos intentos para lograr la vuelta perfecta, y esto añadido a las enormes distancias que hay entre varios grupos de equipos que dan la sensación de que son monoplazas de distintas categorías nos encontramos con parrillas bastante evidentes y deducibles, tanto que antes de que arranque la primera sesión y si sanciones o condiciones meteorológicas distintas lo permiten tenemos una idea predeterminada de todas las posiciones. Con una nueva sesión y recortando los tiempos de las anteriores se obtiene ese factor de azar e incertidumbre a la parrilla del domingo, ya que interviene mucho más el error humano. Los pilotos al tener menos intentos de vuelta tendrán una presión añadida que les puede inducir al fallo, situación que pueden aprovechar otros coches menos competitivos para quedar por delante en parrilla y todos sabemos que con una parrilla alocada se avecina una carrera más que interesante.

Propuesta que a mi modo de ver me resulta más que interesante, desde luego mucho más que el sistema con el que arrancamos la temporada 2016 de eliminaciones uno a uno que daba auténtico pánico y al final el resultado era el mismo. La sesión tendrá en total la misma duración de tiempo, las sesiones serán más cortas y menos pesadas, veremos bastante más actividad en pista por la falta de tiempo y a un solo intento veremos muchos más errores y parrillas bastante desordenadas lo que le proporcionará a la carrera del domingo un plus de emoción que realmente le hace falta a la categoría viendo la remontada de los rezagados en clasificación. Falta por ver la opinión de los equipos sobre esta iniciativa y si se convierte en realidad para el año que viene.