Seis son las carreras que nos quedan para disfrutar de uno de los mayores talentos que ha tenido la Fórmula 1. Seis carreras en las que para Fernando Alonso quizá sea muy complicado igualar la séptima plaza lograda en Singapur, debido a las caracterísitcas de los circuitos, o más bien, a las características de su monoplaza naranja, el cual le ha dado tantos quebraderos de cabeza los últimos años. Por ello, es posible que el pasado domingo hayamos presenciado el último truco de magia del asturiano.

La hazaña comenzó el sábado. Mientras su compañero, Stoffel Vandoorne, no consiguió alcanzar la Q2, el bicampéon español logró la “mini pole”, posicionando su McLaren en undécima posición. En la salida ganó dos puestos, el del accidentando Esteban Ocon, y el de Nico Hulkenberg, y a su vez, resistió los ataques de Sainz. Con un ritmo de carrera fortísimo, como es costumbre en el piloto de Oviedo, y aprovechándose del tráfico de Pérez y Grosjean tras su primera parada, el ex de Ferrari logró ganar otras dos plazas más, haciéndose con la séptima posición, o lo que es lo mismo, la victoria del grupo medio, ya que ningún piloto del top 6 se vio envuelto en algún incidente.

Pero a decir verdad toda la temporada está siendo un truco de magia. Resultaría incomprensible comprender cómo un McLaren aún se encuentra octavo en la clasificación general, de no ser porque sabemos que el hombre que se sube en él es uno de los mejores pilotos que ha tenido la competición en sus 68 años de historia. Como incomprensibles fueron las tremendas palizas que pegó tanto a Massa como a Raikkonen en su estancia en Ferrari, o más aún cómo acaricio en 2012 el título con un monoplaza notablemente inferior al de sus rivales.

¿Habrá sido el de Singapur el último truco de magia de Fernando Alonso en la Fórmula 1? ¿Nos quedará alguno por ver antes del final de la temporada? ¿Veremos alguno más si se da su ansiado regreso en un futuro? Sea como sea, lo cierto es que sólo nos quedan seis carreras para disfrutar de su pilotaje, sus adelantamientos, sus salidas, sus mensajes por radio, su humor en rueda de prensa… Sólo seis carreras. Seis. Personalmente, creo que aún no lo he asimilado.