F1, el talento y el oportunismo
Sergio Pérez en una entrevista hace repaso de su trayectoria en F1, una trayectoria de 8 temporadas de la que se muestra muy orgulloso pero también con una pizca de decepción, ya que piensa que la F1 es una categoría injusta y no ha podido demostrar todo su talento.
Sergio Pérez, piloto mexicano actualmente en la escudería Racing Point Force India. Disputando ya su octava temporada en la máxima categoría del automovilismo luego de debutar en 2011 con el equipo Sauber, concedió una rueda de prensa en México en la que hizo balance de su trayectoria dentro de la Fórmula 1. Se siente una persona afortunada tras haber estado tantos años dentro de la categoría, gracias a mucho esfuerzo y dedicación, pero que sigue siendo una categoría en la que no ha podido mostrar todo su potencial: “Estoy muy orgulloso de mi trayectoria, se me han pasado rápido estos ocho años pero en ellos veo todo el trabajo y la dedicación que eso lleva desde mucho antes. Es cierto que no se ha reflejado todo mi talento, ni mi potencial en este deporte ya que la Fórmula 1 es muy injusta. Hoy en día, si no creces de la mano de las fábricas es muy difícil tener oportunidades en equipos como Mercedes o Ferrari. Aun así, me considero una persona muy afortunada de contar con una carrera tan larga” – comentaba el piloto mexicano en la rueda de prensa mencionada, realizada en Guadalajara.
Así valora Checo, el cual recordemos que salió de la academia de jóvenes pilotos del equipo Ferrari, una categoría en la que si no creces de la mano de un fabricante o una escudería top, es muy complicado (por no decir casi imposible) despuntar o hacer un gran papel. Sergio desempeñó un gran papel en sus temporadas en Sauber, hasta tal punto de ser llamado por McLaren para ser el sustituto de Hamilton, en aquellos tiempos donde McLaren era un coche muy competitivo y aún ganaba carreras. La mala suerte llego cuando a Sergio, una vez ya instalado y lleno de ilusión en Woking, le tocó vivir una de las peores temporadas en la historia de la escudería británica. Una quinta plaza fue el mejor resultado del mexicano en una temporada sin duda muy decepcionante, tras la cual terminó en su equipo hasta día de hoy; Force India. En la escudería india, Checo ha mostrado un gran nivel, metiendo en varias ocasiones un monoplaza que nunca estaba para luchar con los mejores en podios habiendo una carrera alocada. El piloto mexicano y siempre tratando el tema desde mi humilde opinión, lleva la razón en su valoración sobre la injusticia de este deporte en el que grandísimos pilotos sin grandes medios que los respalden (ya sean patrocinadores, una marca o un monoplaza ganador) se quedan con la miel en los labios sin conseguir resultados adecuados a su talento y destreza. Y él en particular me parece un gran piloto que estando en otra situación estaría luchando sin duda por grandes objetivos dentro de la Fórmula 1. Pero no todo en esta categoría se basa en tener patrocinadores y estar en un gran equipo, y precisamente el caso del piloto mexicano es un gran ejemplo.
Y es que Sergio Pérez ha tenido el privilegio de, no sólo de haber estado respaldado por el equipo Ferrari y su programa de jóvenes promesas hasta su desvinculación, sino que también ha pilotado en una de las escuderías más históricas como es McLaren. El nombre de Checo está relacionado con las dos marcas más laureadas de la historia de la categoría, y evidentemente la marca italiana le ayudó a hacerse hueco. Además, el mexicano ha contado con numerosos inversores y patrocinadores que ayudaron en el ascenso de su carrera. Quizá Ferrari allá por 2012 no apostó por él para acompañar a Fernando Alonso a partir de 2013 en detrimento de Felipe Massa, y Sergio llegó a McLaren en uno de los peores bajones de rendimiento que se recuerdan, de un 2012 con un coche ganador a un 2013 sin pisar el podio. En ese sentido la fortuna no le sonrió a un piloto que en esos años se le veía un futuro ganador, pero sigue siendo respaldado y muy respetado dentro del paddock.
Es cierto, lo hemos dicho en numerosas ocasiones. El automovilismo en sí es un deporte en el que debes tener un talento descomunal y los sacrificios que conlleva en numerosas ocasiones son inhumanos, para que después si no estás en el mejor equipo o no eres respaldado ni por patrocinadores ni por marcas top puedes quedarte con las ganas de victoria, y en los casos más extremos puedes verte en casa sin opción a competir. Dependes mucho del equipo, del monoplaza y de bastantes factores externos a ti y a tu pilotaje, pero como diría aquel famoso dicho… This is Racing.