Red Bull – Renault, Renault – Red Bull. Hace mucho que comenzaron las disputas entre dichas marcas. Por suerte, o no, para ambos, pronto terminarán. Poco queda ya de aquella triunfadora alianza que arrasó entre 2010 y 2013. Con la unión de Red Bull y Honda en 2019, comenzará una nueva etapa para la escudería de la bebida energética, y como toda nueva era, se encuentra llena de incertidumbre.

¿Pero qué parte de la escudería de Milton Keynes no se encuentra incierta a día de hoy? No sabemos quién acompañará a Verstappen, no sabemos cómo rendirá su nuevo motor Honda y  no sabemos si la arriesgada decisión de Ricciardo uniéndose a Renault habrá sido acertada. Desde hace tiempo se rumorea que los problemas entre Renault y Red Bull se han iniciado una vez que la escudería gala ha comenzado a aspirar a cosas grandes en un futuro cercano, limitando de esta forma al equipo de la bebida energética que se veía en un callejón sin salida, a pesar del supuesto trato equitativo de los franceses hacia sus equipos clientes. Es cierto que durante los años gloriosos de Red Bull, en los que contaba con motor Renault, la escudería gala también estaba presente en la parrilla, pero su situación era diferente a la actual. El equipo no parecía tener un rumbo definido, y pronto fue adquirida por Lotus.

Lo cierto es que Verstappen tiene razón. El hecho de no contar con un sumintrador de motores propio limita, y en un campeonato donde cada décima cuenta, un equipo puntero no se puede ver en dicha situación. A diferencia de Mercedes o Ferrari, que montan las piezas nuevas una vez salen de la fábrica en la que son diseñadas, en Red Bull deben esperar “dos semanas”, ya que debe pasar el visto bueno por la fábrica de Milton Keynes antes de ser implementada en el monoplaza. Por eso, Max Verstappen cree que “Mercedes y Ferrari implementan sus mejoras de inmediato y tienen una ventaja de una o dos carreras antes de que el resto consigamos aplicar las nuestras. Es lógico, pero es una lástima para nosotros a día de hoy. Básicamente, siempre se encuentran dos carreras por delante”, declaró el talento holandés.

¿Es el motor Honda una moneda al aire? Puede salir cara, tener un motor competitivo y disponer de cada mejora al instante en 2019 al igual que sus competidores, o puede salir cruz y verse envuelto en un ecosistema de averías, pérdidas de potencia, sanciones y enfados. El tiempo dirá.