Si nos remontásemos a los compases finales de la temporada 2012 y ante la noticia que ocasionó un fuerte terremoto en ese entonces, con un Mundial en juego, que fue la marcha de Hamilton de McLaren para recalar en Mercedes. ¿Cuál fue tu opinión al ver el cambio? McLaren en ese entonces tenía un coche totalmente capacitado para luchar por victorias, no fueron aspirantes quizá por sus problemas de fiabilidad, pero la escudería Mercedes a pesar de su evolución no se le veía capaz de luchar por un campeonato a corto plazo. Dos años después los germanos comenzaron a tiranizar la Fórmula 1 hasta nuestros días, dominando todos los campeonatos de pilotos y constructores disputados.

Sí es cierto que a Mercedes se le vio atisbos de poder luchar por la victoria en 2012 (recordamos victoria de Rosberg en China y podio de Schumacher en Valencia), atisbos que se confirmaron en 2013 con 8 podios, tres de ellos con victoria. Del tema que nos ocupa hoy, Renault y la elección de Ricciardo de correr con los franceses, no se está viendo al equipo francés a un nivel como al Mercedes de hace seis años pero el caso puede tener varias similitudes: un gran piloto pasando de un coche ganador a uno de la zona media.

El movimiento sin duda es arriesgado. El propio Daniel lo menciona como un reto. Abandonar Red Bull, tu casa, la que te ha ayudado desde el programa de jóvenes pilotos y la que te ha dado la oportunidad de hacer grandes hazañas en el primer equipo.  Claramente el equipo austríaco apuesta por el joven talento de Verstappen y quizá los motores Honda no le causen mucha ilusión al piloto australiano. ¿Cuál ha sido la evolución de Renault desde su regreso al paddock y qué es lo que puede ofrecerle a Ricciardo su nueva casa?

Recordemos que Renault, campeona de constructores en las temporadas 2005 y 2006, compró el equipo Lotus en 2015 para volver al Gran Circo como constructor tras cuatro años de ausencia. Volvieron a las andadas en la temporada 2016 con Jolyon Palmer y Kevin Magnussen como pareja de pilotos y acabaron antepenúltimos en constructores con 8 puntos, anotando uno el inglés y los otros siete el piloto danés.  En la temporada siguiente el alemán Nico Hülkenberg ficharía por la escudería del rombo sustituyendo a Magnussen y los franceses acabarían sextos en el mundial de marcas con 57 puntos, de los cuales 43 fueron de Hülkenberg, 8 de Palmer y los seis puntos restantes los anotó un Carlos Sainz que participó con Renault en las últimas carreras de esa temporada 2017.

El salto cualitativo lo estamos viendo esta campaña. Tras 12 citas del calendario celebradas, encontramos a la escudería Renault cuarta en constructores (la mejor de los mortales tras Mercedes, Ferrari y Red Bull) con 82 puntos, 25 más que en toda la temporada pasada. La pareja de pilotos está formada de nuevo por Hulkenberg (52 puntos lleva ya el alemán) y Sainz (30 puntos hay en el casillero del madrileño). Dos años después de su regreso los franceses han pasado de pelear en el fondo de la parrilla a ir acariciando posiciones de podio. Quizá esta evolución es lo que le ha llamado la atención al bueno de Daniel Ricciardo. La pretensión de la marca del rombo es que esta gran evolución siga con el paso de las temporadas y que pronto se vean los frutos en forma de podios y victorias. La pareja de pilotos ya la tienen, pues Nico Hulkenberg y Daniel Ricciardo se presumen como una de las alineaciones más fuertes de la parrilla, ahora falta que el monoplaza esté a la altura. Ricciardo sigue con su sueño de ser campeón del mundo y en un Red Bull con Verstappen como compañero quizá pueda tenerlo difícil. Ganar el título y sumar el tercero en el palmarés de Renault es sin duda un reto de altura, pero este ‘aussie’ tiene madera de campeón.