La penúltima remontada de Alonso
El piloto español ha recuperado ya 39 puestos en lo que va de temporada. La incapacidad del monoplaza para ser competitivo los sábados le condenan a escalar semana tras semana.
La figura de Fernando Alonso lleva ya años pagando los platos rotos de sus equipos. Su estancia en McLaren no está siendo diferente y, al igual que le pasaba en Ferrari, el pobre rendimiento del monoplaza atrae sobre él una avalancha de críticas. No hay que escarbar mucho para encontrar el verdadero nivel del asturiano al volante de un Fórmula 1, ya que semana tras semana se encarga de dejar en evidencia al monoplaza que maneja y a su compañero de garaje, Stoffel Vandoorne.
En Silverstone, el Gran Premio de casa para McLaren, el piloto español volvió a hacer gala de sus mejores dotes de conducción y exprimió al máximo el potencial de su MCL33 para llevarlo a la zona de puntos por séptima vez en lo que va de temporada. Además, Alonso lo volvió a hacer remontando, y ya son 39 posiciones las que ha recuperado durante las 10 carreras que se han disputado. La Q3 del GP de España fue un espejismo, un oasis en el desierto que vive McLaren en cada sesión de sábado. Abonado al 12º y 13º lugar, el asturiano siempre que ha acabado la carrera, lo ha hecho en zona de puntos.
Alonso no solo es capaz de explotar en carrera lo que el monoplaza es incapaz de dar en clasificación, sino que su compañero, Stoffel Vandoorne, está siendo otro de los grandes perjudicados de la temporada que está realizando el español. El belga acumula ya un parcial de 10-0 en contra en clasificación, lo que ya dice mucho del buen hacer del asturiano. Por si fuera poco, el belga solo ha terminado en carrera por delante de su compañero cuando este no ha podido llevar el coche hasta la bandera a cuadros. Nadie pone en duda que Fernando Alonso es mejor piloto que Stoffel Vandoorne, pero la diferencia respecto a cómo le sacan partido al coche entre ambos es tan abismal que es digna de reconocimiento.
Las escaladas de Alonso han sido de cinco o seis puestos, a excepción del Gran Premio de España, donde partió en la misma posición en la que finalizó (8º) y Austria, donde tenía a todos los pilotos por delante al inicio y acabó llegando hasta el octavo lugar. Viviendo de Fernando, sabe casi a poco. La sensación popular es que el español tiene que ganar incluso cuando todas las condiciones están en su contra: que tu compañero no te supera, da igual, que siempre remontas en carreras, da igual, que toda el paddock se deshace en elogios hacia tu figura, da igual.
Fernando Alonso es octavo en el mundial de pilotos, a tan solo dos puntos de Nico Hülkenberg, el primero del resto. Por delante de los dos Haas, por delante del Renault de Sainz, por encima de los dos Force India. Sus puntos son el sostén que mantiene a McLaren a la estela del resto de equipos de la media tabla, y aun con todo se sigue cuestionando que Fernando Alonso sea uno de los cuatro mejores pilotos de la parrilla.
Quedan 11 carreras en el calendario, y la de Silverstone no ha sido más que la penúltima remontada del piloto español. Los sábados van a seguir siendo la asignatura pendiente del MCL33, por lo que el asturiano no tendrá opción más que seguir peleando contra los elementos para demostrar que está hecho de madera de campeón.