Si de algo ha presumido Renault a lo largo de su historia reciente es de ejercer la máxima igualdad entre su equipo y los equipos que usan el propulsar francés. Sin embargo, una vez que el equipo se ha puesto las pilas y se han ido acercando a las primeras posiciones de la parrilla, parece que el discurso ha cambiado, y Renault ya no es el ejemplo de la equidad.

Esto viene debido al llamado “Party Mode” que el motor francés parece tener y haber estrenado, y del que ni Red Bull ni McLaren se han beneficiado, lo que ha provocado recelo principalmente en la escudería austriaca que, tras una conversación con Renault, parecen haber solucionado sus diferencias y Red Bull dispondrá de dicho modo en Austria.

“No tuvimos en Francia esta mejora, ya fuese por razones logísticas o técnicas, pero, tras una conversación con Renault, hemos acordado recibir en Austria las mismas mejoras que el equipo principal.” Así de claro se ha mostrado Helmut Marko en declaraciones a Motorsport-Magazin, en el que además destaca que el punto débil de Red Bull es la clasificación, ya que, el ritmo de carrera es bueno. “La clasificación es nuestro mayor defecto. En carrera el ritmo es bueno.”

De ser cierto dicho acuerdo, parece claro que Red Bull puede tener otras armas a la hora de luchar con sus principales rivales Mercedes y Ferrari. En la clasificación de pilotos, Ricciardo parece ser el mejor colocado por delante de Verstappen en la lucha por el mundial de pilotos ya que se encuentra a 49 puntos de la cabeza. Mientras que, en los equipos, Red Bull está a 73 puntos de Mercedes y a 50 de Ferrari. Quizá este modo les acerque al campeonato.