Luego de un fin de semana en el que disfrutó de la alegría y la gloria del pódium en Le Mans, McLaren regresó a Fernando Alonso, de la manera más dura posible, a su lamentable presente en la Fórmula 1. El equipo del monoplaza anaranjado volvió a tener un gran premio decepcionante y los rumores sobre el posible final del ciclo de Alonso en la máxima categoría del automovilismo mundial vuelven a tomar fuerza.

El pasado fin de semana en Paul Ricard podría haber marcado un punto de quiebre en la carrera de Fernando Alonso en la Fórmula 1. Si bien, la escudería de Woking venía de dos carreras sin sumar puntos, la falta de competitividad de su monoplaza fue alarmante. A diferencia de Canadá y Mónaco, cuando Alonso tuvo que abandonar estando en la pelea por sumar puntos, en el Gran Premio de Francia jamás tuvo la oportunidad de pelear por alguna unidad y se vio resignado a luchar entre los últimos lugares con los pilotos de Williams.

La curva descendente de McLaren empieza a generar alarma. La euforia generada por aquellos cinco grandes premios consecutivos sumando puntos con los que Alonso arrancó la temporada ha quedado atrás y el rendimiento del  MCL 33 empeora en cada gran premio. Un nivel que además desnuda los errores del equipo que antes podía culpar de sus pobres resultados a los motores Honda y ahora está lejos de sacar lo mejor del motor Renault.

El callejón sin salida en el que parece haber entrado el equipo McLaren empieza a empujar a Fernando Alonso fuera de la categoría. Para el dos veces campeón del mundo la resignación vuelve a ser la única salida ante una nueva temporada en la que ve que la escudería británica lo vuelve a decepcionar. Sin embargo, la obtención del triunfo en las 24 horas de Le Mans y la cercanía de conseguir la triple corona podría ser una motivación más para que la reacción de Alonso ante los continuos fracasos de McLaren sea dejar la Fórmula 1.

Alonso sabe que no tiene un lugar en los equipos que le podrían permitir pelear por el título o, al menos, por una victoria porque en Ferrari apostarían por Leclerc para sustituir a Kimi, en Mercedes no quieren incomodar a Hamilton y en Red Bull le dan prioridad a los pilotos que ellos formaron. Además, ir a un equipo como Force India o Renault tampoco parece ser la solución debido a que, pese a estar constantemente en la lucha por ser el cuarto mejor equipo de la parrilla, la diferencia con Ferrari, Mercedes y Red Bull sigue creciendo.

Ante un panorama que parece no darle un lugar a Fernando Alonso en un equipo top, la opción de ir a competir en los Estados Unidos empieza a tomar fuerza. El piloto español está cerca de cumplir treintaisiete años y, pese a que demostró adaptarse rápido a los autos de Indycar, sabe que darle una nueva oportunidad a McLaren implicaría esperar a un nuevo cambio importante hasta 2021 (cuando Alonso ya tendría cuarenta años) y no sería el panorama ideal para estar en buen nivel en la búsqueda de la Indy 500.

Si bien, Alonso fue recibido de la mejor manera en Norteamérica y no tendría problemas en encontrar un equipo de primer nivel como Ganassi, Penske o Andretti, en los últimos días, McLaren habría empezado a contactarse con un referente de la categoría, como es Scott Dixon, mediante Zak Brown y podría ser piloto del equipo McLaren de Indycar que debutaría en la serie en 2019. "En lo que estoy centrado ahora mismo es en ganar más carreras con Chip y su equipo y otro campeonato. En eso nos centramos ahora. Lo demás se estudiará más adelante", comentó el dos veces ganador de Indy 500 sin descartar la posibilidad del contrato de tres años que se le habría ofrecido.

Aún queda más de la mitad de la temporada pero el futuro de McLaren y Alonso, al menos en 2018, parece que ha sido escrito. Las posibilidades de ver al asturiano subirse a un pódium son casi inexistentes y el llamado desde Estados Unidos cada vez es más fuerte.