La gran esperada mejora ha llegado. Tras dejar este elemento a Carlos Sainz sin posibilidad de mantener una sexta plaza magnífica para la escudería del rombo, perdiendo 160 caballos de potencia a falta de cuatro vueltas para acabar el Gran Premio de Francia, Renault ha anunciado que podrán usar el MGU-K que llevan dos años desarrollando, anteponiendo la fiabilidad de este elemento que ha dado tantos problemas al motorista francés.

A pesar de que Cyril Abiteboul ha manifestado que todos los equipos que tengan motores Renault van a tener disponible esta evolución, los clientes prefieren esperar a ver cómo funciona en pista y que mejora proporciona, ya que solo hay dos recambios sin penalizar puestos, y la dificultad de adelantar en el inminente Gran Premio de Austria les hace ser precavidos. Tanto Nico Hülkenberg como Carlos Sainz van a disponer de esta actualización sin penalizar, ya que será la segunda unidad que monten en ambos coches.

El equipo del rombo está situado en cuarta posición en el mundial de constructores con un proyecto ascendente y creíble. Sus rivales directos ven complicado desbancarles de esta posición, e incluso Force India ha manifestado que la quinta posición es su objetivo realista, ya que no se ven capaces de sumar más puntos que Renault.

Más motivos de la confianza que desprenden los franceses son las declaraciones de sus pilotos, especialmente Carlos Sainz, cedido por parte de Red Bull esta temporada, y reiterando su compromiso de que Renault es un lugar que se siente feliz y se quiere quedar a pesar de ser el mejor sustituto de Ricciardo si este abandona Red Bull. Aparte, muchos expertos piensan que es la única escudería capaz de alcanzar a los tres grandes equipos.

¿Será esta mejora capaz de acercar a Renault a los motores Mercedes y Ferrari? ¿Será la consolidación de Renault como alternativa? Y por último, ¿Será suficiente para que Red Bull logre ese pequeño paso para igualar a Mercedes y Ferrari? Muy pronto las dudas se resolverán.