Gran Premio de Mónaco, algo debe cambiar
Mónaco, un Gran Premio mítico e histórico, pero que año tras año protagoniza la carrera más aburrida de la temporada, y este año no ha sido menos.
Desde que se inició el fin de semana, quien más quien menos se olía la tostada de lo que iba a ocurrir. Todo hacía presagiar un dominio total de Red Bull el domingo. El accidente de Verstappen al final de los Libres 3, provocaba que no saliera en clasificación, y eso dio un poco de esperanza al público, ya que, con el holandés al final del pelotón, parecía obvio que algo de emoción iba a aportar. Pero no. Se acabó el GP de Mónaco y aún estamos esperando ver la emoción por algún lado.
Para los espectadores, la de ayer fue una carrera totalmente prescindible, aburrida hasta el punto de poder quedarse dormidos como si de una nana se tratara. Los problemas de motor de Ricciardo, el golpe por fallo de frenos de Leclerc a Hartley hacia el final…parecía que alguna circunstancia nos iba a dar el preciado Safety Car que esperábamos, pero eso no ocurrió. ¿La mayor emoción? Difícil de decir, tal vez el podio protagonizado por el gran showman de la Fórmula 1, Daniel Ricciardo. Porque lo que es en pista, emoción…poca.
Año tras año el mismo debate, la misma historia. Incluso los pilotos, que suelen ser bastante comedidos en este tema, lo nombraron. Fernando Alonso no pudo evitar decir “Probablemente sea la carrera más aburrida que ha habido nunca en la F1.” “Necesitamos darle algo más a los aficionados para no devolver el dinero de la entrada”. Sergio Pérez también habló de aburrimiento “Si yo estaba aburrido, no quiero imaginarme a los fans en casa viendo la carrera…”. Ellos son solamente algunos de los ejemplos, ya que muchos de los pilotos se expresaron en la misma línea. Incluso Hamilton fue más allá, declarando haber hablado con el Príncipe Alberto sobre qué se podría hacer para mejorar este Gran Premio “Hablé con el Príncipe Alberto el otro día y le dije que tal vez deberíamos hacerlo más largo. Hay más carreteras, así que tal vez podamos cambiar esta gran pista y hacerlo aún mejor. O tal vez el formato debería cambiar”.
Hamilton hablaba de cambiar el formato de las carreras. ¿Qué se puede hacer con Mónaco? Es un circuito histórico, un lugar donde todos los pilotos sueñan con verse alguna vez en su vida. ¿Cómo puede ser entonces que sea la carrera más aburrida del año? Empecemos por la anchura de los monoplazas. Actualmente tienen 2 metros de ancho, hace dos años 1.80 metros. Mónaco es un circuito que se caracteriza por ser estrecho (7 metros la parte más estrecha y 10 metros la más ancha), por lo tanto unos monoplazas de 2 metros de anchura, más la velocidad, más la competencia, lo tienen complicado para poderse adelantar. ¿Hacer más ancho el circuito? Las calles de Mónaco, son lo que son, al ser un circuito urbano no es tan fácil como ensanchar y ya, hay casas a los lados del circuito que no pueden desaparecer. Hamilton hablaba de hacer el circuito más largo, incluyendo más carreteras para dar una forma diferente al circuito, darle un plus que le diera más emoción y tal vez, hacerlo pasar por calles o carreteras más anchas que permitan los adelantamientos.
Si lo tenemos complicado por las medidas del circuito y de los monoplazas tal vez la solución debería pasar por algo externo a la pista. Otra posible solución, de la que se ha hablado bastante en las últimas horas, tiene que ver con la estrategia. No sería mala idea proponer un cambio en la normativa de forma puntual para Mónaco (o no tan puntual), en cuanto a paradas obligatorias en boxes. Actualmente los pilotos deben parar al menos una vez durante la carrera para realizar un cambio de neumáticos obligatorio. En esta carrera, como ya hemos dicho, es complicadísimo adelantar en pista, y cuando eso es imposible, los adelantos se producen por estrategia, entradas en boxes, undercuts, overcuts… ¿Por qué no proponer una carrera con obligación de dos paradas? De esta forma el juego de estrategias ayudaría a dar un poco de emoción al Gran Premio.
Pero ya sabemos que cambiar una normativa no es tan fácil, ni sucede por arte de magia. Entonces se podría focalizar el cambio hacia otro lugar: los neumáticos. Hay neumáticos con más degradación que otros, y en la carrera de ayer vimos como los neumáticos ultrablandos se degradaban por momentos, en cambio los superblandos que se suponía que eran los peores para esta carrera, aguantaron el tipo. En cada carrera el proveedor de neumáticos, Pirelli, da una lista de gomas que se pueden utilizar en la carrera. ¿Por qué no utilizar únicamente los neumáticos que degradan? De esta forma se obligaría a los pilotos a entrar en más ocasiones a boxes, ocasionando un mayor baile de posiciones y más emoción para el espectador. Además de las entradas a boxes, se añadiría la emoción de que más de uno tendría problemas con la gestión de neumáticos en pista.
Lo que está claro es que esto no puede continuar así, por el bien del espectáculo y de los aficionados, y al fin y al cabo de la Fórmula 1. Lo que no es posible es que gane un piloto que en la vuelta 29 de 78 indique que tiene problemas con el motor, y al final de carrera se descubra que corría con 160 caballos de potencia menos de lo que es normal. Esta circunstancia en otra carrera supondría caer al fondo de la parrilla, pero en Mónaco da igual, porque te sigue dando la victoria, ya que los competidores son incapaces de adelantar.
No se puede vivir un nuevo Gran Premio de Mónaco entre bostezos y cabezadas, algo debe cambiar.