Jorge Martín ha sido el rookie del año. El piloto español ha demostrado una gran adaptación a la categoría reina consiguiendo una victoria, cuatro podios y otras cuatro poles. Sin duda un gran primer año que ha estado a la altura de la primera temporada de grandes campeones del pasado de Motogp. 

En esta primera temporada, Martín ya ha experimentado el dolor de una caída con una Motogp. En la tercera carrera de la temporada, el piloto del Pramac sufrió una dura caída en los entrenamientos libres del sábado por la mañana del Gran Premio de Portugal.

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— JorgeMartínAlmoguera (@88jorgemartin) December 2, 2021

Una caída que le provocó 8 fracturas en manos y pies y 43 días apartado de los circuitos. Pero además del dolor físico, Jorge Martín reflexionó sobre la posibilidad de dejar, definitivamente, la competición. “Cuando sufrí la caída, estaba solo, no tenía a mi familia. En un país en el que no hablaba la lengua. Fue muy complicado comunicarme con los médicos de allí. Cuando llegué a Barcelona, quería dejar las motos. El llegar a pensar en dejarlo, fue el momento más crítico”, explicaba Jorge Martín en un documental elaborado por Dazn. 

Fueron momentos complicados, en los que además de fortalecer su cuerpo para volver a sentirse con la misma condición física que en las carreras de Qatar, tuvo que gestionar su mente. Sus ganas de ganar fueron su gran motivación para sobreponerse. “Tenía mis dudas si volvería a ser el mismo que en Qatar. Pero después de pasar por ese momento, puede sacar la motivación otra vez por querer ganar. No es que quisiera volver, es que quería ganar. Quería volver más fuerte de como me había ido, que era con el podio de Qatar”, comentó Martín. 

De la dura caída que sufrió, el piloto ha aprendido a “tomarse las cosas con mucha calma”. Además, a finales de esta temporada ha tenido la oportunidad de volver al lugar de los hechos. Jorge Martín volvía a conducir su Ducati en el circuito de Portimao. Esta experiencia le ha permitido superarse mentalmente y enfrentarse a un trazado al que llegaba con miedo, después de la caída. 

“En Portimao hice séptimo en una pista en la que hace siete meses pensé que iba a ser el final de mi carrera. Era el único sitio en el que tenía ese respecto, esa cosilla que no sabía si me iba a permitir dar el 100%. Lo he podido dar y esto me demuestra mucho a mi mismo el poder que tiene la mente y lo importante que es la superación. Me llevo solo cosas buenas de este circuito”, concluyó Jorge Martín. 

La temporada terminó por todo lo alto para el piloto del Pramac con un segundo puesto en el gran premio de Valencia. Ahora toca prepararse para un nuevo año en el que Jorge Martín está llamado a ser uno de los pilotos protagonistas. 

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