A medida que comenzaba la sesión matutina de los test de pretemporada en el Circuito de Barcelona-Cataluña, la actualidad ha ensombrecido la acción en pista tras el ataque iniciado por Rusia al territorio ucraniano. De esta forma se abre un nuevo episodio en el conflicto existente entre ambos países desde 2014, cuando los rusos invadieron la península de Crimea, en la costa del mar Negro.

Esta situación también afectará a numerosos eventos, incluidos los deportivos como la Fórmula 1, dadas las importantes controversias internacionales. De hecho, la UEFA tiene pensado cancelar la final de la Champions League en San Petersburgo y establecer una nueva sede. Actualmente, Rusia está incluida en el calendario del Gran Circo, algo que sucede desde 2014, pero este Gran Premio podría cancelarse.

En primer lugar, Sebastian Vettel fue tajante en una rueda de prensa celebrada durante la sesión matutina: “Me he despertado otra vez después de ver las noticias de la mañana, estoy impactado. Creo que es terrible ver lo que está pasando, y si miras al calendario, hay una carrera programada en Rusia”, ha explicado mientras confirmaba su intención de no competir en Rusia.

El tetracampeón ha sido un importante estandarte dentro de la Fórmula 1 en lo que se refiere a los derechos humanos y ha manifestado su decisión: “Para mí, mi decisión propia, es que no se debería correr en ese país. Lo siento por la gente, por los inocentes que están perdiendo la vida y que son asesinados por razones estúpidas bajo un liderazgo extraño y loco - y añadió - estoy seguro de que es algo que hablaremos en la GPDA, pero como he dicho, no nos hemos reunido este año”.

Otros pilotos también han mostrado su opinión al respecto, Fernando Alonso explicó que “haría lo mejor”, Charles Leclerc espera que la Fórmula 1 tome una decisión cuando tengan más información y Max Verstappen sostuvo que “en una situación bélica, es mejor no competir allí”.

Se espera que la FIA, responsables de la Fórmula 1 y jefes de equipo se reúnan esta tarde para abordar el asunto. La propuesta que está encima de la mesa es cancelar el Gran Premio de Rusia, siendo sustituido por Turquía, que por tercer año consecutivo acogería una carrera por razones de fuerza mayor.